calle larios

Pablo Bujalance

La calidad educativa

ESCRIBO estas líneas mientras el ministro José Ignacio Wert se reúne en Madrid con los consejeros autonómicos de Educación para exponerles el borrador de la nueva Ley Orgánica de Mejora de la Calidad Educativa (LOMCE). Los acontecimientos se suceden: la consellera catalana de Enseñanza, Irene Rigau, ha plantado al ministro al considerar "inadmisible el texto", y al final, ya lo verán, el asunto quedará entre el empeño del nacionalista Wert en españolizar a los niños catalanes y el de los nacionalistas catalanes en desespañolizar a sus niños. Lo importante dormirá en lo anecdótico, pero en este sentido me pareció mucho más significativa la virulencia con la que Celia Villalobos acusó a la rectora de la UMA, Adelaida de la Calle, de haber hundido a la misma en el fango del desprestigio. Creo que, exactamente, se trata de eso. La Mejora de la Calidad a la que se refiere el borrador no es un discurso metafísico, sino que obedece a medios de evaluación tecnócratas como los del Informe PISA y la Unesco. En estos termómetros, el sistema educativo español aparece siempre entre los últimos puestos europeos. Pero lo que estos medios evalúan es el grado de conocimiento adquirido por los alumnos en distintas disciplinas, y no la inversión que los países destinan a sus escuelas. Es decir, se pone a España a competir con países como Finlandia o Suecia, que triplican la inversión en la escuela pública y en sus universidades, y se pretende que la adopción de competencias por parte de los estudiantes sea la misma. Dado que el Gobierno español no parece muy dispuesto a invertir en su educación pública, la única estrategia posible es justo la contraria: promover la imagen de los estudiantes españoles como vagos y delincuentes, incapaces de hacer la O con un canuto, y la de ciertas rectoras como vendidas al ostracismo sociata. Lo uno y lo otro es rigurosamente falso. La única mejora que queda por hacer es la del gasto. Pero mejor gastemos en Bankia.

MÁS ARTÍCULOS DE OPINIÓN Ir a la sección Opinión »

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios