Normas tatuadas

06 de julio 2025 - 03:09

El cartel de la feria de agosto vino con lío. En la recta final del concurso, han descalificado a dos autores por incumplir las bases. Un caso, el de la obra Tattoo, me toca de cerca. En palabras de su autor:

“¿Han oído eso de que el desconocimiento de la ley no exime de su cumplimiento? Pues me ha pasado a mí. Me llamaron del equipo responsable de Fiestas y me comunicaron que era finalista en el concurso de este año. Me felicitaron y me explicaron que me enviaban un enlace para poder votar…”.

Agustín es un diseñador gráfico excepcional, de pocas palabras, salido de la factoría de San Telmo. Su compromiso con las artes plásticas es una referencia en el ambiente creativo de Cencaheriland. En lo personal, tiene buen ojo para la obra gráfica, dibujos y óleos; cuenta con piezas de Juan Béjar, Francisco Peinado, Brinkmann, Chicano, Antoni Tàpies, Plácido Romero, Chema Lumbreras, Barbadillo, Pedro Avilés o Violeta Fortes… Por ello, de modo cariñoso, le decimos Agusthyssen. Pero en otros asuntos de la vida, Agus tiende al despiste. Con lo de la descalificación de su cartel de feria, no salía de su asombro. Reconoce que, al leer las bases del concurso, sólo prestó atención a los datos técnicos y poco más. En la página tres de un documento de nueve se especifica:

“5.- La participación en el concurso es anónima y ha de mantenerse así durante el transcurso de todas las fases del concurso, no pudiendo difundirse imágenes de los carteles (seleccionados o no), ni su autoría por parte de las personas participantes hasta que se haya realizado la presentación oficial del cartel ganador. El incumplimiento de las bases en relación con la obligación de anonimato tendrá la consideración de infracción grave. La sanción por esta infracción grave supondrá, además de la exclusión automática de esta edición, la imposibilidad de presentarse al concurso durante un período de tres años”. Agustín ha pedido disculpas públicas por su confusión y matiza, muy sutil: “A la luz de lo sucedido, pienso que habría que debatir qué clase de anonimato es el que se tiene votando a través de las redes sociales”. Como es buena gente, encima felicita a la ganadora del concurso. Lástima que nos perdamos un trienio de la genialidad creativa de Agus para la feria; las bases del concurso sí le han quedado tatuadas en su decepción. Muchos ánimos, artista ;-)

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