El Comité de Gestión de Málaga mantiene la dotación de agua para riego en el pantano de La Viñuela

Málaga/El Comité de Gestión de Málaga de la Demarcación Hidrográfica de la Cuenca Mediterránea Andaluza ha analizado la situación de los distintos Sistemas de Explotación, dejando patente que en el caso del Sistema Viñuela-Axarquía "a pesar de la escasez de precipitaciones en el presente año, se ha propuesto mantener las dotaciones de agua para abastecimiento y riego fijados en la reunión del Comité de Gestión que celebramos el 5 de noviembre del pasado año", según ha indicado el delegado territorial de Agricultura, Ganadería y Pesca, Fernando Fernández Tapia-Ruano.

Fernández Tapia-Ruano ha presidido la sesión ordinaria del Comité de Gestión de Málaga de la Demarcación Hidrográfica de la Cuenca Mediterránea Andaluza, que cumple un año desde su constitución en abril de 2020, "dentro de la apuesta de la Junta de Andalucía por la participación pública en el ámbito de la política de aguas".

En el Sistema Viñuela-Axarquía ha explicado el delegado territorial que la dotación se mantiene en 13,9 hectómetros cúbicos para abastecimiento y 18,7 hectómetros cúbicos para riego. Todo ello, a pesar de que este sistema de La Viñuela-Axarquía "ha contado con 255 litros/m2 hasta el 28 de abril del presente año, lo que supone 100 l/m2 menos que en el año 2019/20 y 182 l/m2 menos que la media histórica".

En cuanto al Sistema Guadalhorce-Limonero, la pluviometría ha evolucionado de forma irregular, siendo la precipitación registrada en el pluviómetro de la presa del Conde del Guadalhorce hasta finales de abril de 385,2 l/m2, prácticamente igual que la media histórica de 392,6 l/m2. Las propuestas de consumos para este año hidrológico alcanzan los 47 hm3 para abastecimiento y los 37,6 hm3 para riego.

Esta sesión, que se ha desarrollado de manera telemática, ha contado con la participación de los representantes de asociaciones de regantes, asociaciones sindicales y empresas gestoras de recursos hídricos, que asisten como invitados.

Junto al delegado territorial de Agricultura en Málaga al encuentro han asistido el director general de Planificación y Recursos Hídricos, Fernando Delgado y el director general de Infraestructuras del Agua, Sergio Arjona, así como los representantes de los agentes económicos y sociales, de la Federación Andaluza de Municipios y Provincias (FAMP), de las organizaciones ecologistas y de los usuarios del agua.

En la sesión Fernando Fernández Tapia-Ruano ha recordado que "enmarcada en la revolución verde del actual Gobierno andaluz", con la orden de 28 de mayo de 2019 que regulaban los Comités de Gestión de las Cuencas Intracomunitarias de Andalucía, "la Consejería de Agricultura, Ganadería, Pesca y Desarrollo Sostenible comenzó a activar los órganos colegiados de participación administrativa y social que integran la Administración Andaluza del Agua".

"A pesar de que estos órganos colegiados de participación fueron creados por el anterior Gobierno de la Junta, nunca llegaron a funcionar al no establecerse el desarrollo normativo que regulaba su funcionamiento", ha especificado.

Por ello, el actual Gobierno andaluz constituyó el Comité de Gestión de Málaga, que cumple ya un año, "manteniendo el compromiso de realizar dos sesiones anuales, una al inicio del año hidrológico (octubre-noviembre) y otra a mediados del año hidrológico (abril-mayo) y logrando una participación activa de todas las partes interesadas en el ámbito de la política de aguas".

Decreto de sequía

Por su parte, el director general de Infraestructuras del Agua ha señalado que "el proyecto de Decreto de Sequía continúa su tramitación y se encuentra pendiente del dictamen del Consejo Consultivo, por lo que en breve plazo podrá entrar en vigor".

En virtud del mismo, será posible aprobar en aquellos ámbitos geográficos afectados por una situación de excepcional sequía obras de emergencia, así como el empleo de aguas regeneradas para usos agrarios con el fin de paliar la falta de recursos hídricosempleo de aguas regeneradas para usos agrarios, debido en gran parte, a la falta de lluvias en los últimos años.