El campo de Málaga vive su peor campaña desde 2010 por la sequía y la competencia exterior
La facturación se sitúa un 5,77 % por debajo respecto a 2024, con niveles de hace más de 10 años y costes "desorbitados" en ganadería
Las exportaciones de aguacate y mango en Málaga superan en nueve meses las de todo 2024
La Asociación Agraria de Jóvenes Agricultores (Asaja) ha alertado este miércoles sobre la situación a la que se continúa enfrentando la agricultura y ganadería de la provincia con niveles de hace más de 10 años y "costes desorbitados", según los últimos datos de su balance de 2025. En concreto, en facturación han advertido de un descenso del 5,77 % y, con ello, un total de 633,48 millones de euros respecto al año anterior (672,3 millones, una bajada de 38,82), lo que representa "la segunda peor campaña de la serie" establecida desde 2010.
"Los efectos de la sequía siguen lastrando la facturación. Los acuíferos no se han recuperado en la mayoría de los puntos de la provincia, tendríamos mejores cifras si hubiera garantía de suministro. Además, esto se suma a los costes y a la falta de mano de obra. Se está desincentivando el trabajo, necesitamos medidas que mitiguen esta situación", ha destacado el presidente de Asaja Málaga, Baldomero Bellido.
El informe realizado por la entidad revela que la agricultura sigue teniendo la voz cantante con el olivar que concentra el 40 % del total; seguido de hortícolas, que rondan el 24 %; y de los cíctricos y herbáceos, representando un 6 % cada uno. Por su parte, en la ganadería prima el porcino blanco, que representa el 41 % de su facturación; el caprino de leche y carne con un 33 % y el resto de producciones situadas en torno al 5 %.
"Seguimos no en la ruina pero sí sufriendo bastante", ha reseñado, por otro lado, Benjamín Fauli, responsable de Frutas y Hortalizas Asaja, quien ha esclarecido que en comparación con 2010 o 2012 y "se ve un descenso brutal". Tiene que ver con la falta de lluvia por la que "muchos agricultores" aseguran que "no me interesa sembrar". "El sector sigue afectado por la ausencia de rentabilidad", ha recalcado.
Impacto de terceros países
El papel de la rentabilidad, según ha indagado Bellido, se disminuye también debido a la competencia de terceros países que manifiesta "una tendencia atroz", pues "no hay controles de fronteras efectivos" en cuanto a posible "transmisión de enfermedades o controles de calidad". "La defensa de la soberanía alimentaria es importante, no depender de otros. Se está haciendo un acuerdo por parte de la comisión de agricultura con Mercosur (Marruecos y otros países del Mediterráneo), parece la solución pero realmente no lo vemos así. Va a afectar a todos nuestros sectores", ha sentenciado. A su vez, la climatología "adversa" deja inundaciones y pérdidas como en el caso de la dana, no suficientemente compensadas. Con esta última en Málaga "se registraron 1.800.000 euros de gastos" y los agricultores se han beneficiado con "1.600.000 euros", sin contar los gastos de "retirada de animales muertos".
"La fiscalidad es una cuestión crucial, vienen las elecciones europeas y tenemos una reserva de la PAC (Política Agraria Común) que no da solución es estos problemas. Hay cultivos que si no tienen ese aporte, no sobreviven. Debe estar adaptada a la realidad de los cultivos cada año, o se consigue o no podremos evitar el deplore", ha exigido, en relación también la eliminación de la deducaciión por gasóleo y fertilizantes.
Agricultura
En relación a la agricultura, este año 2025 alcanza 505,46 millones de euros (80% de la facturación general junto a un 20% de la ganadería), frente a los 541,52 de 2024, con un claro decenso del 6,65%. El olivar se mantiene como "cultivo mayoritario" con más de 135.000 hectáreas. Sin embargo acumula ya "un tercer año de baja producción" en aceite de oliva con 35.200 toneladas y una cifra de facturación de 139,04 millones de euros, ocasionada además por el cambio de precio "bastante elevado" de la temporada anterior y su bajada en esta (de 7,35 el kilo a 3,95 euros). Por el contrario, la aceituna de mesa da un repunte notable al haber "recuperado producción", de 35.105 en 2024 a 52.600 toneladas con un precio incrementado a 1,18 euros el kilo (62,07 millones de euros). "La aceituna es imporante en la provincia, tenemos la variedad aloreña que es única", ha distinguido Bellido.
Los cultivos hortícolas y tubérculos, asimismo, han registrado subidas de un 7 % respecto al año anterior, a causa del espárrago, cebolla y tomate, con 121,74 millones de euros. Aunque, por otro lado, siguen "sin mejorar la situación global, al ser el segundo peor año desde 2010". "En el caso de los tomates se ha incrementado bastante por la disponilidad de agua, pero la competencia también nos está bloqueando, Marruecos, Sáhara y Turquía", ha asegurado Fauli. La cebolla "ha mejorado" hasta los 8 millones de euros "tras la caída en picado de 2023"; la patata "ha caído un 23 % por el descenso de superficie en la provincia" (9,67 millones de euros en facturación). Le siguen el pimiento, con un "descalabro" del 11,4 % respecto a 2024 (14,28 millones); y la alcachofa, "tradicionalmente estable, pero a la baja" con 14, 28 millones; las judías verdes en "su peor año de la serie" con un descenso del 25 % respecto al año pasado y un 31 % si lo comparamos con el 2022.
La lluvia ha permitido una mayor producción en cultivos tropicales (en la Axarquía), con un incremento del 23 % y una facturación de 102,9 millones de euros. En esta línea, el mango "ha resistido mejor que el aguacate" que se ha recuperado "un poco" (32.000 toneladas, un 15,3 % más y 72,6 millones de euros). El mango, así, ha producido 37.000 toneladas y ha tenido una facturación de 27,38 millones de euros" siendo "la más alta hasta la fecha" con precios por debajo del euro.
Los cítricos malagueños, fundamentalmente concentrados en el Valle del Guadalhorce "por desgracia bajan cada año". "Estamos muy lejos de los niveles que necesitamos para tener una rentabilidad mínima", ha destacado el responsable de frutas y hortalizas. Una ruina absoluta por la competencia en importaciones". El limón "sí se recupera un poco aunque con niveles muy bajos": 13, 63 millones de euros, respecto a los 8,23 del 2024. La naranja pasa de 16,61 millones a 14, 23 millones este 2025; y los pequeños cítricos bajan de 7,84 millones a 4,88 este último año. Por su parte, según aporta el documento, el almendro se mantiene en niveles similares; la castaña "pega un subidón y vuelve a niveles más o menos normales"; y en los viñedos desciende la producción en la uva de vino y la pasa por la sequía.
En cuanto a los cereales y herbáceos muestran un declive, según ha relatado el secretario de Asaja, Santiago Sánchez, ha pasado de 30,14 millones de euros a 28,19. Los cereales "se han mantenido por el incremento de la producción" (de 52.677 t. a 79.581), a pesar de que los precios "no hayan acompañado". Los herbáceos "mantienen cierta rentabilidad gracias a las ayudas de la PAC", pero sufren por "el incremento de costes, la entrada masiva de terceros países y los aranceles a fertilizantes rusos". "Se ha incrementado la superficie sembrada en un 11 % y en olivar, almendro o pistacho porque requieren menos mano de obra y más rentabilidad. Ha habido una buena cosecha pero el precio de venta sale a una media de 23 céntimos por kilo y tenemos mucha producción de trigo duro aún sin vender", ha aclarado.
Ganadería
En el campo de la ganadería, el veterinario de Asaja, Alberto Pérez, ha recalcado un año "bastante marcado a nivel sanitario" con un descenso de 128 millones de euros respecto a los 130 de 2024 . El porcino blanco se lleva el "mayor peso económico" pero ha bajado ligeramente respecto al 2024, pasando de 55,61 millones a 53,17 de ellos en el último año. Por otro lado, el vacuno de carne se sitúa en 5.080 cabezas y una facturación de 6,32 millones; y el de leche está en 3,36 millones de euros, con un "pequeño récord por la subida de precios". Le siguen las cifras del caprino, que sigue "sin recuperación" ni en carne de chivo que "registra la peor facturación desde 2010", ni en leche de cabra con una caída del 17 % en el censo de los últimos cuatro años, atravesando "costes verdaderamente terribles, una actividad muy intensificada y que requieren trabajo y una inversión muy importante". El porcino ibérico manifiesta una situación sostenida con una facturación cercana a los dos millones.
En el sector de la avicultura (carne de ave y huevos) la facturación se sitúa en 13,8 millones de euros con "un crecimiento sostenido" pero con "normativas más exigentes". "Es por el precio pero no es más rentable". Así, la facturación total ganadera ha vivido un descenso de un 2,11 % que se suma al del 8,51 % del 2024 respecto al 2023, por los costes "desorbitados", la sequía y un panorama sanitario complicado. "Hacen falta ayudas y medidas a nivel estatal y autonómico para afrontar la importancia social y ambiental y la salud frente a enfermedades como la peste porcina que transmite la fauna silvestre. Necesitanos un plan de control nacional. Esa fauna silvestre no es un problema solo de la ganadería, un problema a nivel de sociedad, porque ya están los núcleos urbanos, es un peligro para las personas y encima un vehículo de enfermedades que nos compromete la economía de los medios rurales", ha insistido Pérez.
Ante la "difícil situación" de la agricultura y la ganadería, la Asociación Asaja planea presentarse este jueves 18 de diciembre en Bruselas para abordar una situación "insostenible" con la previsión del decenso del presupuesto de la PAC de la Comisión Europea "que podría llegar al 33 % (si se aplicara la inflación). Así como por una entrada de productos de terceros países "que no cumplen con la misma normativa que las que nos exigen a nosotros". "Cuando hay una votación no existe respaldo, no queremos palabras sino hechos", ha concluido Bellido.
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