El edificio del Mueble Rondeño se convertirá en escuela de hostelería

Ronda tendrán un edificio fantasma menos para finales de año. De lista se caerá el conocido como edificio del Mueble Rondeño, un inmueble que se encuentran en desuso, y que fue concebido para recuperar la industria del mueble de estilo rondeño, aunque nunca llegó a cumplir con el cometido para el que fue concebido. Un proyecto que contó con la financiación integral de la Junta de Andalucía, que destinó 1,2 millones de euros a su construcción.

Ahora, casi una década después del inicio de su construcción, tendrá que ser rehabilitación sin haber llegado a abrir sus puertas de forma constante. Únicamente ha sido utilizado para actividades puntuales de algún taller de formación y para representar un pasaje del terror dentro de un programa de ocio nocturno. El Ayuntamiento de Ronda anunció ayer la licitación del proyecto de reforma, que tendrá un presupuesto de 360.000 euros. Las obras, financiadas por la Diputación de Málaga, consistirán en la eliminación de los problemas de filtraciones que tiene el edificio, finalizar los saneamientos, solucionar los problemas de refrigeración que existen en estos momentos y adecentar la fachada exterior, construida con madera y cristal, y que presenta un estado muy deteriorado por efecto de las duras inclemencias meteorológicas. Además, también se tendrá que realizar algunas modificaciones en el interior para acoger el futuro centro educativo.

En cuanto a la ejecución de los trabajos, según explicó la responsable municipal de Contratación, María del Carmen Martínez, la empresa adjudicataria tendrá tres meses para la finalización de los trabajos. Y es que la intención del Gobierno local es hacer viable la apertura de la escuela de hostelería coincidiendo con el inicio del próximo curso. Una vez ejecutada la reforma, será la asociación de la pequeña y mediana empresa de Ronda y Campillos (Apymer), la encargada de realizar en acondicionamiento interno del recinto, que tendrá que estar dotado de los espacios necesarios de aulas, cocinas y catas de vinos.

El proyecto supondrá recuperar la idea inicial que ya lanzó la propia Apymer, que llegó a tener abierta la escuela de hostelería durante un año, situando su sede en el edificio del Círculo de Artistas, aunque lo hacía en solitario y sin colaboración del Consistorio rondeño.

En esta ocasión, tras alcanzar un acuerdo de colaboración, el Ayuntamiento se encarga de la rehabilitación del edificio y cede la gestión a los empresarios, que llegaron a iniciar la instalación de las cocinas en el interior del inmueble, aunque la operación se abortó ante las deficiencias y la imposibilidad de acometer en aquellos momentos las reformas necesarias con fondos municipales. Aunque se espera que la apertura se pueda producir para el próximo curso, todavía no se fijó una fecha concreta para al inicio de la nueva actividad.