La plataforma contra el proyecto de construcción de una incineradora en Humilladero ha convocado una manifestación para el próximo domingo con el fin de mostrar el rechazo de los vecinos a la puesta en marcha de estas instalaciones.

Además, han pedido que la empresa que adquirió los terrenos municipales para desarrollar este proyecto devuelva los mismos al Consistorio y abandone sus intenciones.

Desde la plataforma han explicado que también han estado manteniendo contactos con alcaldes de municipios cercanos para recabar su apoyo contra la construcción de esta planta de reciclaje, al considera que se tratarán productos “tóxicos” y temen que pueden ser perjudiciales para la salud.

De forma paralela vienen realizando concentraciones de protesta todos los miércoles para dejar constancia de su oposición a este proyecto que en primer momento se presentó con el respaldo del Consistorio y se anunció como una importante inversión para el municipio.

Tras conocerse que se trataba de una incineradora una parte de los vecinos comenzaron a mostrar su rechazo al proyecto e iniciaron las movilizaciones para tratar de frenarlo.

Unas protestas que llevaron en su momento al hoy alcalde en funciones, José Asencio, a asegurar que en la localidad no se aprobaría ningún proyecto que pudiese ser perjudicial para la salud de los vecinos, aunque aquellas declaraciones no hicieron desistir a los vecinos que rechazan la planta.

Inversión de 160 millones de euros

Tras la firma del acuerdo para la venta de estos terrenos desde el Ayuntamiento se informó que la empresa sueca Gartena Group había elegido Humilladero para ubicar una planta de generación de energías limpias, adquiriendo una parcela de 38.000 metros cuadrados que el Ayuntamiento poseía en el polígono industrial ‘Royán Bermudo’. Una actuación que conllevará una inversión de unos 160 millones de euros y que conllevará unos ingresos de alrededor de 700.000 euros para las arcas municipales por la venta de estos terrenos.

Un proyecto que también se anunció que contempla la creación de 60 empleos directos y alrededor de unos 200 indirectos una vez que se encuentre a pleno rendimiento, aunque para eso todavía se tendrá que esperar entre dos y tres años, que es el tiempo que se estima que podría tardar el completarse todo el proceso de construcción. En cuanto al inicio de los trabajos, en aquel momento se indicó que la intención era poder iniciar la construcción a lo largo del año 2023, aunque todo depende de la obtención de los permisos necesarios por parte de las diferentes administraciones.