El próximo 13 de mayo los trabajadores de Urbaser en Fuengirola podrían iniciar la tercera huelga de limpieza y de recogida residuos en la localidad en menos de un año para continuar con sus reivindicaciones en caso de no alcanzar un acuerdo previo con la empresa y con el Ayuntamiento. Los trabajadores llevan ya dos años reclamando mejoras en la negociación del nuevo convenio colectivo sin que hasta la fecha se haya alcanzado ningún acuerdo.

Las tres partes volvieron a reunirse este lunes en el Sercla con la intención de llegar a un acuerdo con el que poner fin a esta problemática. Sin embargo, la reunión quedó aplazada a este viernes, cuando se volverán a sentar tras estudiar las últimas ofertas. “La empresa lanzó ayer una propuesta que nos parece insuficiente y dijimos que de aquí ya no nos bajamos y debían consultarlo con Madrid, por lo que se pidió el aplazamiento”, explicó Carlos Pastrana, portavoz del comité de empresa.

Por su parte, según detalló el delegado sindical de CCOO de Urbaser en Fuengirola, José Manuel Hernández, la empresa habría aceptado la propuesta del cobro íntegro de las vacaciones de 2019, lo que actualmente les supone una merma de 300 euros, mientras que los trabajadores solicitan además la creación de una bolsa de trabajo que sea controlada por la empresa y el comité y que las pagas extras de Navidad y de verano se queden en un precio único de 1.400 euros. “Ningún trabajador tiene ganas de huelga pero es el último recurso que nos queda y nos vemos empujado a ello tanto por la empresa como por el Ayuntamiento. Esta ya sería la cuarta huelga que se promueve y la tercera que se lleva a cabo”, manifestó.

Por otro lado, los trabajadores demandan al Ayuntamiento la redacción de las condiciones del nuevo convenio colectivo de cara a su licitación el próximo año, una vez vencido el contrato, en el que se recojan las principales demandas del sector. Para ello, reclaman la puesta en marcha de un calendario de negociaciones que tendría lugar la próxima semana con el objetivo de confeccionar el nuevo pliego, por lo que la huelga quedaría aplazada hasta la finalización del mismo. “Independientemente de que el viernes se llegue a un acuerdo con la empresa no nos conformaríamos con eso puesto que en 2020 tendríamos que negociar un nuevo convenio. De cara al nuevo convenio tenemos claro que queremos eliminar las desigualdades del convenio y eso está en manos del Ayuntamiento”, añadió Pastrana.

La plantilla retomó las movilizaciones el pasado mes de abril con una manifestación por las calles del municipio y concentraciones semanales en la plaza del Ayuntamiento para reclamar, entre otros puntos, el cobro íntegro del salario durante las vacaciones y las pagas extras, así como la regularización de las bolsas de trabajo.

En caso de no alcanzar un acuerdo está previsto que la madrugada del domingo al lunes dé comienzo una nueva huelga de recogida de basuras que se prolongaría durante casi tres semanas hasta el 31 de mayo. Está previsto que a lo largo de esta semana se fijen los servicios mínimos.

Esta sería la tercera huelga de limpieza y de recogida de basuras en la localidad en menos de un año. La primera tuvo lugar en el mes de agosto del año pasado, en plena temporada turística, y se prolongó durante diez días; mientras que la segunda, más corta, coincidió con la celebración de la Feria del Rosario que tiene lugar a mediados del mes de octubre. Los empleados plantearon entonces a la empresa un total de 27 puntos a recoger en la negociación del nuevo convenio colectivo, pero ante la negativa de la empresa de no recoger ninguna de sus reclamaciones al menos hasta el año 2020, fecha en la que se cumple el actual contrato, que deberá salir de nuevo a concurso público, presentaron un nuevo plan finalista que recogía todas sus demandas a resolver en un plazo de tres años, del que tampoco llegó a haber acuerdo.