El último temporal de poniente que azotó la costa de Rincón de la Victoria ha vuelto a evidenciar la vulnerabilidad de sus playas frente a los embates del mar. Las precipitaciones acompañadas de fuertes vientos han provocado daños en las playas, especialmente en la zona más occidental del municipio, cercana al arroyo Totalán, así como en Torre de Benagalbón. Aunque los estragos no son catastróficos, la situación ha encendido las alarmas entre las autoridades locales, quienes reclaman una respuesta urgente del Gobierno.
La costa del municipio ha sido testigo de un aumento en la frecuencia e intensidad de los temporales en los últimos años, lo que ha provocado daños significativos en la infraestructura costera. El concejal de Playas, Sergio Díaz, ha confirmado que se está elaborando un informe detallado sobre los daños ocasionados por el último temporal, el cual será presentado a la Demarcación de Costas en Málaga. "Esta acción forma parte de un protocolo establecido que se repite cada año", ha recalcado Díaz.
Por su parte, el alcalde, Francisco Salado, ha reiterado su exigencia a una intervención inmediata por parte del Gobierno central para poner fin a esta situación crítica. Desde 2019, el municipio ha solicitado la construcción de diques y otras medidas de protección costera, "pero estas peticiones han sido ignoradas". Los daños económicos causados por los temporales en años anteriores, como los 80.000 euros registrados en 2023, subrayan la urgencia de tomar medidas preventivas y de restauración en la costa.
Incidencias en otros municipios de Málaga
En Málaga, las recientes lluvias también desencadenaron una serie de incidentes, principalmente relacionados con el exceso de agua. En Estepona, se cortaron el acceso a los ríos y arroyos debido al repentino aumento de sus caudales, mientras que en Periana se registró el desbordamiento del arroyo Marchamona, interrumpiendo el tráfico en una vía. En Alcaucín, la crecida del río Alcázar causó la rotura de una tubería de agua, dejando sin suministro a varias áreas del municipio. Además, en Marbella se reportaron inundaciones en los bajos de una vivienda.
Por otro lado, la red de carreteras públicas sufrió graves contratiempos, con desprendimientos en diferentes puntos. En Riogordo, un deslizamiento en el Camino del Río obligó a utilizar maquinaria pesada para despejar la vía, mientras que en Canillas de Aceituno e Iznate se registraron desprendimientos de rocas que obligaron a cerrar carreteras. El Consorcio Provincial de Bomberos también tuvo que intervenir para retirar árboles caídos en diversas localidades, incluyendo Vélez-Málaga, Pujerra e Igualeja.
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