Las previsiones se han cumplido y durante la mañana de este miércoles han aparecido lluvias en el interior de la provincia, aunque las mimas no han sido de gran relevancia. Eso sí, en zonas como la Serranía de Ronda el paisaje se cubrió de paraguas y chubasqueros, al tiempo que se han tenido que sacar la ropa de abrigo ante la bajada de las temperaturas.

A algunos turistas las precipitaciones les han pillado de improviso y han tenido que recurrir a comprar chubasqueros en algunas de las tiendas situadas en la zona de centro. Allí volvía a ser un reclamo la venta de este tipo de ropa y paraguas con diferentes motivos turísticos.

El paisaje también se transformó y las sierras que rodean a la ciudad del Tajo se encuentran cubiertas por las nubes y las nieblas que están dejando estas lluvias.

La previsión de lluvias se desvanece

La previsión de lluvias en Málaga para el miércoles se desvanecían desde este pasado martes conforme pasaban las horas y se desdibujan en el mapa los chubascos que hace unos días abrieron una pequeña ventana a la esperanza de que, al menos, se pudiera refrescar el campo malagueño que lleva meses sin recibir un buen aporte de agua. Pero por desgracia la borrasca vuelve a pasar de puntillas.

Así lo explicaba el director del Centro Meteorológico de Málaga, Jesús Riesco, que señalaba que el frente llegaría a Málaga debilitado y que solo dejará algunas lluvias débiles en zonas aisladas del interior de la provincia. "Caerá algo pero en principio bastante poco, en la costa puede que ni se note", apuntaba.

La borrasca sí que ha afectado con más repercusión al tercio occidental andaluz. De hecho, la Aemet ha activado para este miércoles avisos amarillos por lluvias en el litoral de Huelva y Cádiz, así como en la campiña sevillana.