Pedro Guerro ‘Chito’ es la voz y la cara de los 101 kilómetros de la Legión. El speaker rondeño es lo primero que escuchan -lo harán este sábado 14 de mayo- los participantes en la prueba  legionaria tanto en la salida como en la llegada. Verle es señal de que han logrado culminar el recorrido y oírle en la distancia supone que estás cerca de conseguirlo.

Chito, como le conoce todo el mundo en el mundillo de las carreras de montaña, llegó a los 101 casi por casualidad al quedarse en paro tras el cierre de televisión Localia y la recomendación de un compañero de profesión, Miguel Ángel Navarro, al no poder contar los organizadores con la speaker habitual de la prueba. “Este chaval hace bien estas cosas”, asegura que le dijo al entonces responsable de la carrera que decidió darle una oportunidad allá por el año 2006, fecha desde la que es el animador de esta mítica prueba.

Desde entonces ha tenido la oportunidad de vivir mil historias, aunque sigue guardando un espacio especial para Francisco Contreras ‘SúperPaco’. “Fue muy especial poderle recibir en meta en la edición de 2018, en el año 2019 el hombre ya estaba enfermo y no pudo terminarla”, recuerda.

Un tiempo en el que Chito ha tenido ocasión de vivir cientos de pedidas de mano o la salida de la prueba desde el antiguo campo de fútbol, tiempos en los que incluso había una modalidad para caballos.

Tampoco han faltado las anécdotas a lo largo de estos años en las que ha sido el propio protagonista. “El problema que tiene hablar tanto es que alguna vez te equivocas, como aquella ocasión en la que llegó un señor a meta con un niño pequeño y le pregunté por lo bonito que tenía que ser llegar con su nieto y me contestó que era su hijo (risas)”, explica.

Otro de esos momentos especiales fue el vivido en el año 2016 cuando tres corredores que habían mantenido una dura lucha por el primer puesto durante toda la prueba se terminaron esperando unos a otros en los últimos metros para entrar juntos en meta. “Aquello fue muy potente, nadie sabía que pasaba con el primer marchador que se suponía que tenía que llegar y no entraba, era que se estaban esperando”, explica Pedro Guerrero.

De igual modo, guarda con especial recuerdo la primera victoria de un rondeño Juanma Cortes. “Era la primera vez que recibía en meta a un rondeño de cuna como ganador de los 101. Joan Marc es rondeño de adopción y tan rondeño como cualquiera, pero lo de Juanma fue una victoria muy trabajada y fue muy especial”, señala Guerrero