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Medio Ambiente

Un estudio advierte sobre el riesgo de las especies invasoras en el Tajo de Ronda

  • José Gómez, catedrático de Geografía Física de la UGR pide medidas preventivas urgentes

  • Apunta en su investigación sobre el riesgo para la estabilidad mecánica del cortado

Alianto en los jardines de Forestier situados en el Tajo de Ronda.

Alianto en los jardines de Forestier situados en el Tajo de Ronda. / M.H. (Ronda)

José Gómez, catedrático de Geografía Física de la Universidad de Granada, que lleva estudiando desde hace años cómo la vegetación exótica prolifera en Ronda y su entorno, advirtió este jueves sobre el caso "especialmente alarmante" del Tajo y de los principales accesos a la ciudad.

En concreto, apuntó a la proliferación ailantos, acacias, opuntias cilíndricas o viñas del Tíbet entre las especies que se consideran invasoras y que se han convertido en la vegetación "predominante" en el Tajo según la investigación de este catedrático.

Además, considera que esta situación "está generando un importante deterioro ambiental y paisajístico de este monumento natural", al tiempo que señala el "riesgo" que considera que puede suponer para la estabilidad mecánica de sus escarpes y de las edificaciones existentes al filo del cortado "dado su comportamiento rupícula y fisurícola".

En este sentido, considera "especialmente grave" el asedio del ailanto a los jardines de Fosterier, un espacio que se encuentra catalogado como Bien de Interés Cultural. De igual modo, también apunta a la rápida expansión de la liana china que "ya cubre grandes extensiones de este espacio protegido".

Eso sí, no todas las especies consideradas como invasoras han aumentado su presencia, ya que las populares chumberas que ya no son predominantes debido a la llegada de la cochinilla algodonosa.

Mientras tanto, en el exterior de la ciudad el principal problema lo fija en la abundancia de la hierba de la Pampa, en especial en los jardines de la barriada Rosalejo y del Hospital de la Serranía. "Se trata de una peligrosa gramínea que tiene un gran potencial de expansión, ya que cada penacho produce 100.000 semillas", sostiene. A ellas se unen otras como el bambú, la yuca, el agave o la acacia.

Finalmente, advierte sobre el peligro que pueden suponer para el entorno serrano, ya que, al estar junto a las carreteras de acceso podrían ser una vía de dispersión.

Ante esta situación, asegura que "Cuanto antes se controlen las especies invasoras, mejor. Es urgente la adopción de medidas preventivas y erradicadoras.

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