Investigación y Tecnología

¿Eres intolerante al frío? Estos son los otros problemas de salud que oculta

¿Eres intolerante al frío? Estos son los otros problemas de salud que oculta

¿Eres intolerante al frío? Estos son los otros problemas de salud que oculta

El invierno se ha hecho esperar en nuestro país y parece que ha llegado manifestando todo lo que no ha podido en meses cuyo protagonismo le han robado las altas temperaturas. Así, su llegada ha sido en forma de temperaturas extremas que han afectado a la mayoría de rincones de la península. El frío en sus peores caras no suele ser bien recibido por (casi) nadie, sin embargo siempre existe ese alguien a quien su termostato parece alertarle más de lo normal. ¿Existe la intolerancia al frío? Lo cierto es que todas las personas pueden ser más o menos sensibles a la temperatura. Pero cuando esta sensibilidad es tan fuerte que el frío se vuelve insoportable, puede ser una señal de otros padecimientos subyacentes. Entre ellos, la disfunción de la glándula tiroides, el flujo sanguíneo arterial y la baja grasa corporal. Pero hay más, te los contamos.

SIGNOS

De acuerdo con Mayo Clinic, las personas que padecen este tipo de sensibilidad la manifiestan a través de la urticaria por frío. No se sabe exactamente su origen, pero en la forma más frecuente de esta afección, el frío desencadena la liberación de histamina y de otras sustancias químicas en el torrente sanguíneo.  Estas sustancias químicas provocan enrojecimiento, picazón y, a veces, una reacción en todo el cuerpo.

Así, los signos más frecuentes de alerta cuando se exponen a temperaturas más bajas de lo normal suelen ser:

  • Erupciones cutáneas y urticaria
  • Hinchazón
  • Fatiga
  • Dolor de cabeza
  • Sibilancias
  • Dificultad para respirar

CAUSAS

Como hemos mencionado, una de las causas comunes del frío suele ser un bajo índice de grasa corporal. Esto ocurre porque la grasa actúa como aislante, permitiendo mantener el calor corporal. En el caso de las mujeres es más común debido a que su peso y el nivel de grasa suele ser inferior al de los hombres. Asimismo, los cambios hormonales suelen ser un factor añadido, como por ejemplo la sensibilidad aumentada en los cambios de temperatura durante la menopausia.

Pero existen causas más graves que manifiestan otro tipo de enfermedad. Las más comunes son:

  • Anemia: La anemia es una afección que se desarrolla cuando la sangre produce una cantidad inferior a la normal de glóbulos rojos sanos.  La falta de hemoglobina puede provocar que el cuerpo no obtenga la suficiente cantidad de sangre rica en oxígeno lo que produce, entre otros síntomas, cansancio y debilidad, a la vez que provocar que las personas sean más sensibles al frío. En este caso, el síntoma respondería a la falla en al circulación que origina la anemia.
  • Síndrome de Raynaud. Es un trastorno en el cual se produce un estrechamiento anómalo de los vasos sanguíneos ante ciertos estímulos, como el frío o el estrés.
  • Enfermedad arterial periférica. Según Mayo Clinic, uno de los síntomas de esta enfermedad es la sensación de frío en la parte inferior de la pierna o en el pie, en especial en comparación con la otra extremidad. Esto se produce debido a que en esta patología se acumula placa en las arterias que transportan sangre al resto del cuerpo. Esto hace que sea más difícil que la sangre circule a través de ellas. Así disminuye el flujo sanguíneo a las extremidades, creando sensación de frío.
  • Hipotiroidismo.  Cuando la glándula tiroides no produce la suficiente cantidad de hormona tiroidea, se produce menos calor corporal. Esto se traduce, en consecuencia, en una mayor sensación de frío, entre otros síntomas.
  • Problema del hipotálamo. Es el área cerebral que se encarga de regular la temperatura corporal. Por ello, cualquier enfermedad que se afecte este nivel puede alterar el mecanismo.
  • Anorexia nerviosa. Como hemos comentado, la grasa es un aliado fundamental en la exposición al frío, así como una herramienta para reservar energía y calor ante situaciones de estrés ambiental. En la anorexia, las reservas de grasa se agotan debido al infrapeso, lo que se traduce en sensibilidad al frío.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios