Semana Santa

Salió el sol para hacer brillar a la Virgen de la Estrella, aunque la alegría fue breve

  • Hasta pasadas las 20:00 la hermandad de la Humillación no abrió las puertas de la iglesia de Santo Domingo

  • La cofradía perchelera acortó su itinerario pero la lluvia la pilló en mitad del recorrido oficial 

La Virgen de la Estrella con la iglesia de Santo Domingo al fondo.

La Virgen de la Estrella con la iglesia de Santo Domingo al fondo. / Domingo Mérida (Málaga)

Después de chaparrones, cielos cubiertos, arcoíris y mucha incertidumbre salió el sol para alumbrar las últimas horas de la tarde. Y con él tomaron las calles las hermandades de Las Penas y Humillación, casi al unísono, desde distintos puntos del centro histórico.

De la iglesia de Santo Domingo, pasadas las 20:05, salió la cruz guía y el cortejo de capirotes blancos de la sección de Nuestro Padre Jesús de la Humillación y Perdón. Por la plaza hacia el puente de la Esperanza realizaron sus primeros pasos camino del Pasillo Santa Isabel y la calle Especería. Su objetivo era estar en Tribuna pasadas las 21:30 para seguir a Las Penas en el recorrido oficial, que solo tres hermandades harían este Martes Santo

Con una mecida suave y acompasada, sin paradas hasta el inicio de la rampa de la plaza, el Nazareno de las manos atadas a la espalda, talla realizada en 1942 por el imaginero malagueño Francisco Palma Burgos, realizó una impecable salida inmortalizada por centenares de móviles en un espacio repleto de público. 

Media hora más tarde, del interior del templo se escucharon las primeras campanas del trono de María Santísima de la Estrella y las cabezas de varal aparecieron bajo el dintel. La Virgen, una obra anónima del siglo VIII, fue recibida entre aplausos por sus fieles con la candelería completamente encendida y un exquisito adorno floral en colores rosa que contrastaba con el azul de su manto y su palio. 

Pero esta antigua cofradía perchelera, que ingresó en la Agrupación hace casi un siglo, en 1924, no tuvo una jornada fácil antes de iniciar la procesión de sus Sagrados Titulares. Esa madrugada, las hermandades de Martes Santo informaron de cambios en sus itinerarios ante las inclemencias del tiempo previstas. 

Nuestro Padre Jesús de la Humillación de espaldas. Nuestro Padre Jesús de la Humillación de espaldas.

Nuestro Padre Jesús de la Humillación de espaldas. / Domingo Mérida (Málaga)

En un primer momento, su salida se atrasó desde las 17:45 a las 19:00, siendo la cuarta en el recorrido oficial. En su cuenta oficial de Twitter, la hermandad también anunció que no saldrían desde su casa hermandad sino desde la iglesia de Santo Domingo. Pero a la hora señalada llovía con fuerza y decidieron aplazar nuevamente la apertura de puertas hasta las 19:45. 

Se escuchaban aplausos en el interior y gritos de júbilo, que eran secundados por aquellos que esperaban pacientemente fuera. Pero la puerta continuaba cerrada y así se hizo esperar otros veinte minutos. Este retraso hizo que la hermandad alterara su recorrido habitual y evitara la ida el Llano de la Trinidad, Mármoles y el puente de la Aurora. 

Sin embargo, la alegría que habían mostrado en Puerta del Mar, con marchas festivas y el paso acompasado, fue breve. Cuando la cruz guía pasaba la Alameda, un chaparrón inesperado e intenso hizo cambiar por completo los planes de la corporación. Con celeridad, y tras verse obligados a proteger a sus titulares con plásticos, se dieron la vuelva y emprendieron un regreso rápido, a tambor, por la calle Torregorda y el puente de la Esperanza. 

Aunque habitualmente Humillación se encierra en su casa hermandad, decidieron acortar unos metros para refugiarse en la iglesia de Santo Domingo, desde donde habían salido menos de cuatro horas antes. Como paró de llover, se recrearon en el encierro a su manera habitual, al son de malagueñas y con los tronos a pulso. 

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