Cataluña recupera poco a poco la normalidad tras el colapso sufrido el lunes por la tarde a causa del temporal de frío y nieve que azotó esta comunidad autónoma. 122 municipios, la mayoría en Girona, continuaban a media tarde sin suministro eléctrico, uno de los principales problemas que ralentizan la vuelta a la rutina.  El conseller de Interior, Joan Saura, anunció a mediodía que el Govern ha abierto expediente informativo a REE y Fecsa Endesa a raíz de lo ocurrido. Los tramos de carretera afectados descendieron a 84 en una jornada en la que más de 200.000 alumnos no pudieron asistir a sus respectivos colegios por la presencia de nieve.  

A media tarde, el secretario general de Interior Joan Boada, a partir de las previsiones que trasladó Endesa, anunciaba que el 70% de los abonados que se quedaron sin luz, un total de 220.000, principalmente en la demarcación de Girona, recuperarían el suministro a lo largo del martes.  

Sin embargo, la propia compañía afirmaba una hora después que  no podía aventurar datos de recuperación del servicio eléctrico pese a que los trabajos de reparación continúan "a contrareloj", y porque dependen de la puesta en marcha la totalidad de la línea de alta tensión Vic-Juià, dependiente de Red Eléctrica de España (REE).

Tanto Red Eléctrica Española (REE) como Fecsa Endesa informaron a la Generalitat que en 122 municipios, situados mayoritariamente en la provincia de Girona, siguen los apagones eléctricos, aunque ambas empresas confían en que en las próximas cuatro horas se normalice la situación.

Boada repasó, en rueda de prensa, que cayeron 33 torres de Endesa, 14 líneas y entre 7 y 8 subestaciones. Asimismo, recordó que se han dispuesto grupos electrógenos para asegurar el suministro en zonas o instalaciones más vulnerables, como hospitales, o en algún municipio que usa el sistema de bombeo para extraer agua.  

 Sin luz continuaban también a media tarde los ocho puertos de la provincia de Girona, sin suministro eléctrico desde la noche del lunes después de que el temporal provocara la avería de la línea de alta tensión de 220KV entre Vic y Julià.

De las 41 Áreas Básicas de Salud de la Región Sanitaria de Girona, doce funcionan con normalidad, mientras que el resto no dispone ni de luz ni de teléfono. Aún así, se están ofreciendo los servicios de atención continuada. 

Alumnos sin clase y asistencia en carretera

El número de alumnos que se quedaron este martes sin clase aumentó a 215.623 en todo el territorio catalán debido a la presencia de nieve, que obligó también a cerrar 713 centros y a suspender 883 rutas de transporte escolar. Los colegios de Girona, según el secretario general de Interior de la Generalitat, Joan Boada, fueron los más afectados el lunes por el temporal.  

Pero los estudiantes no fueron los únicos afectados por la nieve. Los conductores también sufrieron grandes problemas para poder desplazarse. La RACC atendió entre el lunes y el martes 16.600 llamadas que necesitaban asistencia mecánica o información a causa de las condiciones meteorológicas de las últimas horas en Cataluña.  

La cifra es una de las más altas de la historia y supone un 50% más de llamadas que en un día normal. Unas 10.500 personas llamaron a lo largo del lunes, mientras que el martes lo hicieron, hasta las 17 horas, 6.100 más. La mayoría procedían de conductores que, tal y como explicó el director del servicio de asistencia de RACC, Daniel Cornudella, precisaban información sobre dónde comprar unas cadenas o pasar la noche.

El transporte se recupera poco a poco

La Dirección General de Protección Civil solicitó el lunes por la noche la intervención de la UME para paliar los efectos de las nevadas en Cataluña. Cerca de un centenar de efectivos de la Unidad Militar de Emergencias (UME) colaboraron este martes en la limpieza de nieve acumulada en diversas carreteras de la provincia de Girona tras las fuertes nevadas registradas.  

Alrededor de las 19 horas de este martes, el total de tramos de carreteras afectados por el temporal de hielo y nieve se rebajaron de 131 a 84, de los que 20 continúan cortados, informaron fuentes del Servei Català de Trànsit (SCT).  

La provincia con mayor número de vías afectadas es Barcelona -con 62 de carretera perjudicados, de los que 13 están cortados-, seguida por Girona -13 tramos, de los que 4 están cortados -, Tarragona y Lleida.  

Por su parte, la autopista AP-7 acumulaba por la tarde 50 kilómetros de retenciones en el acceso a Francia por la Jonquera (Girona), después de la reapertura total al tráfico pesado y como resultado de la absorción progresiva por parte de esta vía de los más de 10.000 camiones que el lunes se quedaron varados en diversos puntos de Cataluña.

El secretario general de la Conselleria de Interior aseguró que se han mantenido conversaciones entre Generalitat, delegado del Gobierno y el prefecto francés para tratar de abrir otro carril de entrada al país galo, habida cuenta de que todavía tienen que salir 5.000 camiones y crean colas de hasta de 40 kilómetros en la AP-7, desde el paso de la Jonquera.  

Y al mal tiempo, buena cara. El Ayuntamiento de Barcelona informó este martes que no multará a los conductores de los 160 vehículos que las grúas han retirado desde la tarde del lunes y que han trasladado al depósito municipal porque dificultaban la movilidad, después de que los conductores tuvieran que estacionarlos en las aceras y la calzada porque la nevada les impedía avanzar.  

Las tres líneas de tranvía de Barcelona funcionaron este martes con normalidad, después de que el lunes el servicio se viera afectado por el temporal. El personal de manteniemitno trabajó a lo largo de la noche para reparar los tranvías afectados.  

Por su parte, el aeropuerto de Girona operó a las 13 horas del martes cinco de los 31 vuelos de salida previstos para el martes, pero poco a poco iba recuperando la normalidad, según informó AENA.

Nevada comparable a la de 2001

La nevada que azotó el lunes Cataluña y provocó la acumulación de gruesos por encima de los 60 centímetros en numerosos puntos de las comarcas de Barcelona y Girona es comparable a las ocurridas el 30 de enero de 1986 y a la del 15 de diciembre de 2001, y ligeramente superior a las del 1 de marzo de 1993 y la del 27 y 28 de enero de 2006, informó el Servicio Meteorológico de Cataluña (SMC), adscrito a la Consejería de Medio Ambiente.

 El SMC señaló en un comunicado que "la nieve se aleja de Cataluña, el viento amaina y el oleaje pierde fuerza", aunque recordó que a partir de la noche del martes está previsto que disminuyan mucho las temperaturas, por lo que se producirán heladas "generalizadas". En cualquier caso, recordó que durante el temporal se registró una ola máxima de 7,7 metros de altura en la boya de Roses (Girona), además de rachas de viento de 133 kilómetros por hora en Portbou.

Muy diferente es el punto de vista del Gobierno de la Generalitat. El consejero de Interior, Relaciones Institucionales y Participación, Joan Saura, consideró que la nevada del lunes "no tiene nada que ver" con la que se produjo hace nueve años, y que también provocó grandes colapsos y cortes en el suministro eléctrico.

En la rueda de prensa posterior al Consell Executiu, Saura dijo que la nevada del lunes fue de una magnitud mucho mayor que la de 2001 y también consideró que la respuesta dada por el gobierno supera con creces a la que dio entonces, bajo los gobiernos de Jordi Pujol y en las que el tripartito, en la oposición, criticó duramente al consejero en cap, Artur Mas, por asistir en un acto a una discoteca de Vilassar de Mar (Barcelona) durante el temporal de frío y nieve.