Es recurrente que Joan Plaza hable de que prefiere jugadores con experiencia en Europa, mejor si es posible en España, a la hora de fichar. Y es una novedad que aterrice para tener un rol importante un jugador que no había salido de EEUU, como Ray McCallum.

Pero lo cierto es que la costumbre de no fichar jugadores sin experiencia en Europa en el Unicaja viene de más atrás. Hubo algunos años atrás que tuvieron minutos en el Unicaja con el Clínicas Rincón como puente para su primera experiencia en Europa, como Mark Payne, Billy Baptist o Piwi García. Pero fueron remiendos en la plantilla por lesiones o bajo rendimiento.

Para encontrar una apuesta seria, de partida, al inicio de una temporada, por un jugar novato en Europa hay que remontarse a la temporada 2004/05, cuando llegó a Málaga para ser el escolta teóricamente titular J. R. Bremer. El zurdo llegó con 24 años tras haber militado en Boston Celtics, Cleveland Cavaliers y Golden State Warriors. Jugó un año en el que fue importante en el título de Copa, con medias de 11.9 puntos, 2.3 asistencias y 2.6 rebotes por encuentro en 27 minutos de media. Se le cambió a la temporada siguiente por Marcus Brown (previa marcha sin vestir de verde de Trajan Langdon) y comenzaría una itinerante carrera que le llevó a jugar en Italia, Bosnia, Grecia, Rusia, Turquía, Líbano y Francia. Obtuvo la nacionalidad bosnia y llegó a ser internacional con el país balcánico. 13 años hacía que el Unicaja no apostaba de partida por un americano sin experiencia en Europa.