Unicaja

La Copa de Bruno

Darío Brizuela, con la Copa.

Darío Brizuela, con la Copa. / ACB Photo

El Unicaja alzó la Copa del Rey justo el día en que Bruno Brizuela cumplía un mes. Es, sin duda, la historia humana de este título inesperado e inolvidable para toda Málaga. El hijo del escolta donostiarra tuvo un problema importante de salud con apenas dos semanas y tuvo que ser operado de urgencia el fin de semana anterior a la Copa. "Los peores día de mi vida", decía tras haber realizado un partido monumental ante el Barcelona, al que le coló 27 puntos. Brizuela agradeció el apoyo de sus compañeros. Dylan Osetkowski dio un discurso en el vestuario muy emotivo para agradecer en el nombre todo lo que Darío había hecho. Cuando mejoraba de salud el crío, decidió viajar a Badalona con el resto de sus compañeros.

El vestuario y el club ha apoyado a Brizuela en este trance. "Gracias a todo el mundo por el cariño y apoyo que hemos recibido mi familia y yo. No lo olvidaremos", decía tras el partido a través de las redes compartiendo una publicación de su mujer, Uxue, con una foto del pequeño Bruno en el hospital. Ha permanecido todo este tiempo en la UCI, aunque la progresión es muy buena. En cualquier caso, la Federación le liberó de acudir a esta ventana de partidos internacionales para que pudiera estar con la familia en estos momentos duros, que parecen mejores ahora.

El jugador se vio abrumado por las muestras de cariño, se había respetado su deseo de mantener la privacidad, pero con la emoción tras el final del partido ante el Barcelona se derrumbó y entre lágrimas explicó lo que ocurría. Brizuela se ganó la admiración del baloncesto español por cómo compitió en una circunstancia extremadamente complicada. Fue esencial para la victoria ante el equipo y culé y después no estuvo en la misma productividad, pero siempre sumó, también esforzándose detrás y teniendo alguna racha en la final también De alguna manera, el MVP de Tyson Carter también es en parte suyo. Ambos se están haciendo mejorar defendiéndose uno a otro. El director deportivo, Juanma Rodríguez, explicaba cómo la competencia está mejorando a todos. "En la posición de dos, Carter, que lo conocíamos de haber jugado contra nosotros, nos daba algo distinto y diferente, en términos de talento. Le íbamos a poner a Darío un jugador por delante con talento para no depender de él como se había dependido en otras temporadas. Creo que ha sido bueno para Darío porque le ha hecho crecer y que haya competitividad cada día en el entrenamiento. Sabe que tiene que mejorar defensivamente y lo hace muy bien para ser más completo", señalaba.

Está siendo una temporada muy especial para Brizuela, que comenzó con el título de campeón de Europa en septiembre, con la inigualable emoción de ser padre, con ese problema de salud del hijo que sobresaltó a todos y ahora este título de Copa, en el que fue pieza más que importante. Su gran amigo Alberto Díaz le pidió que saliera a recoger el título como los dos capitanes del equipo. Y la foto para la posteridad quedó así.

Con su forma de jugar, que entraña su riesgo, pero calculándolos mejor y sabiendo elegir mejor, en función de cuando está en racha o no. Es la Copa del Unicaja y también, como el propio jugador escribía, la Copa de Bruno.

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