Como en la temporada pasada, el Unicaja ha tardado tres jornadas en conseguir su primera victoria en la Liga ACB. El partido en Andorra, repleto de contratiempos desde la lesión de Bouteille a la expulsión de Waczynski sirvió para sumar el primer envite ganado de los malacitanos: "Ha sido un partido muy competido, muy igualado, muy físico. Buena respuesta a nivel reboteador. La palabra que el equipo ha interpretado muy bien es competir, en defensa, en ataque. Hemos dado un paso adelante en ese sentido. Satisfecho con el equipo, cada partido crecemos y hoy ha sido un crecimiento tremendo a nivel competitivo y mental".

El equipo mostró una muy buena versión sobre todo en el último cuarto, cuando no perdió la concentración y fue capaz de voltear el encuentro que perdía por cinco canastas: "Eso es también competir, tener buena mentalidad, creer en lo que estás haciendo. Ver lo que tienen los partidos, independientemente de altas y bajas. Creemos en el trabajo que hacemos. El equipo siempre trabaja junto, está unido y muy contento con el sacrificio que han hecho los chicos".