Unicaja

Dylan Osetkowski: "En Málaga me siento como en casa, es un lugar muy agradable para jugar"

Osetkowski, ante el Girona

Osetkowski, ante el Girona / Carlos Guerrero

Es un tipo particular Dylan Osetkowski, cuyo crecimiento deportivo ha sido claro esta temporada, consagrado como un jugador de una dimensión superior al que llegó en 2022. Difícil retener al californiano este verano, pero el Unicaja está protegido ante cualquier escenario. Osetkowski reflexionaba en los micrófonos del club, interesante y profundo, como un buen grueso del vestuario malagueño. Del futuro más cercano y los objetivos hasta el verano. "Creo que puede pasar de todo. Con lo que nos queda por delante, podemos ganar la Final Four de la BCL, podemos ganar la ACB, y también podemos perder ambas. Pero yo diría que nuestro objetivo es ganar la BCL. Después de lo que pasó el año pasado, en el vestuario, de forma colectiva sabemos que se nos escapó una oportunidad de las manos, y creo que como grupo estamos muy centrados y motivados para ganar la BCL este año. Y también con la ACB, obviamente con equipos como Madrid o Barça, año tras año, siempre están en lo más alto, pero dije esto al ir a la Copa del Rey. No elegiría a ningún equipo antes que a Málaga para jugar con o en contra de una competición. Voy a elegirnos siempre", mensaje confuso ese último, pero alude a que ve al Unicaja a ese nivel actualmente.

El de San Diego hablaba del proceso tan extraordinario que ha desarrollado el Unicaja en los últimos tiempos. "El año pasado, creo que cuando un equipo se forma, y tienes una plantilla completamente nueva, creo que lleva tiempo de desarrollar. Esas relaciones con los compañeros, con el entrenador especialmente para entender cómo funcionan los chicos, la personalidad de cada uno. Y me refiero a que, como se puede ver, el año pasado creo que hicimos un trabajo increíble, desde el personal que ha formado el equipo hasta los jugadores y entrenadores, que todos se sientan parte del equipo, y que empezó a funcionar desde el primer día. Obviamente tenemos casi el mismo equipo, sumando la llegada de Kameron. Nos ha resultado increíblemente fácil empezar el primer día con una base ya aquí, nosotros ya empezamos arriba y otros equipos no. Tanto por parte de los jugadores, entrenadores, el club. Creo que puedo hablar por todos cuando digo esto. Málaga es un lugar muy agradable para jugar, en cuanto a los jugadores y entrenadores, porque es realmente un equipo. En todos estos años en los que he jugado al baloncesto, siempre hay compañeros que tienen una personalidad más fuerte que los demás, son algo egoístas. Tienen cierta destreza con los entrenadores. Pero de arriba a abajo, desde el primero hasta el último que sale del banquillo, todos quieren jugar para los demás. Todos cubren las espaldas de los demás, el de al lado quiere lo mejor para mí. Así que a quién se le pregunte, esto demuestra ser un equipo".

"Creo que mis expectativas, cuando recibí la llamada para jugar aquí, sabía que sería una oportunidad increíble. Sabía que me iba a encantar estar aquí. Pero no sabía que hasta este nivel, que me haría sentir como si de vuelta en casa, en San Diego. No sabía que me iba a llevar tan bien con la gente que tiene similar personalidad a la mía y la forma relajada de pensar, el estilo de vida. Era todo lo que podía pedir. Esperaba grandes cosas. Pero estar aquí ahora, creo que será de los mejores años de mi carrera". Habrá que jugar esa baza para convencerle en los próximos tiempos. "Lo que más me gusta de Málaga es el tiempo. Simple. Me remonto a mi época de Francia y Alemania. Mi padre fue a visitarme cuando jugaba en el Ulm. Y durante una semana o el tiempo que fuera, no hubo ni rastro de sol. Solo estaba todo gris, con nieve y lluvia. Mi padre me miraba como diciendo que esto era un poco deprimente. Puede ser. Así que estar aquí y todo el año tener el cielo azul y la playa cerca. Digo que es lo mejor porque en mi opinión el tiempo se contagia a todo el mundo, la energía y la personalidad. Si hace sol fuera y la gente puede salir para tomar un café o comer fuera; la vitamina D, que te da energía. Si tienes que quedarte dentro todo el tiempo y solo puedes salir fuera para ir a tu coche o lo que sea, porque está nevando, no es la mejor calidad de vida comparada con algo como aquí. Obviamente, hay que adaptarse y aprender a vivir así. Pero para mí, que nací y crecí en San Diego, en Málaga me siento como en casa".

Osetkowski recuerda su primera vez en Málaga, flechazo en aquel Unicaja-Ulm de Eurocup de la 20/21. "No sé si fue en diciembre, enero o febrero, en algún momento del invierno. Y nos alojábamos en Benalmádena Higuerón Resort y me dijeron que estaba a cinco minutos andando de la playa. Pero tienes que bajar toda la cuesta para bajar hasta allí. Debí estar en la playa como dos horas, antes del partido en el agua, y recuerdo que pensé cómo alguien logra jugar aquí. Esto parece mi ciudad natal, San Diego, el clima, la playa, el estilo de vida. Fue algo, que en cuanto llegué aquí, pensé, wow. Si tengo la oportunidad de venir a jugar a Málaga, tengo que venir aquí. Y afortunadamente las estrellas se alinearon para que pudiera venir aquí. Pero sí, en cuanto llegué aquí, el simple de hecho de estar aquí, me recordaba a mi tierra y sabía que era un lugar en el que quería estar"

"Soy una persona bastante tranquila. No me gusta salir mucho de fiesta y estar fuera. Me gusta no estar solo, pero tener mi propio tiempo libre, hacer mis cosas, hacer lo que quiero. Lo que me motiva fuera del baloncesto son mi familia y mis amigos. Como mucha gente ve, me gusta viajar yo solo y recorrer el mundo. Me encanta viajar, experimentar diferentes partes del mundo, ver distintos lugares, pero luego me motiva a diario mi familia", el lado un poco más personal. Antes de la Copa del Rey, Osetkowski atendía a Málaga Hoy, ahondando en otra cara del californiano: tatuajes, Elvis, melómano, viajar... Y San Diego.

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