La labor del trío arbitral Conde-Padrós-Fernández no dejó nada satisfecho al Unicaja en el partido ante el Herbalife Gran Canaria. El Carpena ya se lo recordó en varios tramos del encuentro. El sentimiento era extendido también el vestuario cajista. Tras el duelo, Jaime Fernández admitía en los micrófonos de la Cadena Cope los errores propios que habían costado el partido pero también dejaba clara su insatisfacción con los colegiados, que le señalaron una técnica. Pero no sólo por eso. 7 tiros libres del Unicaja y 21 del Herbalife, se repetía en el seno del Unicaja. Katsikaris aludía a que los árbitros habían dejado jugar duro y que había que adaptarse. Es uno de los retos también de los nuevos dirigentes malagueños recuperar peso en los despachos.