Pasan los días pero siguen siendo de vino y rosas para algunos jugadores del Unicaja. Aunque todas las miradas (o casi) terminan dirigiéndose a un chico que está deslumbrando en este arranque de temporada. Sí, es Jaime Fernández, cómo no, que a pesar de regresar a Málaga con la derrota continúa creciendo en la cancha y superando sus propias barreras estadísticas personales.

Asumido el tropiezo colectivo, Jaime puede estar satisfecho con su actuación personal. Además de anotar 13 puntos en un partido que resultó más complicado de lo esperado, adornó su show con la friolera de ¡11 asistencias! ante el San Pablo Burgos. Todo para alcanzar una valoración final de 23 puntos. Unicaja dio 17 en el partido.

Es su techo, de momento, en la Liga Endesa, donde ya acumula casi 250 partidos. Su mejor marca antes del encuentro en Burgos quedó situada en nueve pases de canasta cuando era jugador del Estudiantes. La primera vez, en 2013 contra Obradoiro y en 2016 ante el Valencia Básket.