El Unicaja ya ha remitido a la FIBA la lista de 16 jugadores para participar en la Basketball Champions League, competición en la que el club malagueño debutará dentro de dos semanas con su visita al Nizhny Novgorod ruso. La BCL tiene normas similares, con matices diferentes, a las de la Eurocup. Tras esta primera inscripción se pueden hacer cuatro más a lo largo de la temporada derivadas de cambios que pueda haber en la plantilla.

En la lista de 16 jugadores no se encuentra Edgar Vicedo, cuyo contrato de un mes abarcaría el primer partido, aunque hasta el comienzo de la competición se puede cambiar. Están los 13 jugadores que forman parte de la primera plantilla (Norris Cole, Alberto Díaz, Jaime Fernández, Darío Brizuela, Francis Alonso, Pablo Sánchez, Axel Bouteille, Jonathan Barreiro, Tim Abromaitis, Carlos Suárez, Yannick Nzosa, Micheal Eric y Rubén Guerrero) más tres canteranos: José Roberto Tanchyn, Álvaro Fernández y Rubén Vicente.

Una vez comienza, se pueden hacer cuatro cambios más en el plantel hasta emplear 20 jugadores, con el tope del día antes del arranque de los cuartos de final, cuando ya no se podrá realizar ningún intercambio. De ahí hasta el final, ningún refuerzo se puede hacer. Un jugador puede cambiar de equipo participante en la BCL una vez durante la temporada, no más.

Si en la Eurocup y la Euroliga hay libertad total para contratar jugadores extracomunitarios, en la BCL se tiende más a la protección que se ejerce en las ligas nacionales con los cupos. Concretamente, en el caso de 12 jugadores inscritos para un partido, cinco deben ser “home grown players”, el equivalente al jugador de formación local que se maneja en la ACB, aunque con un pequeño matiz. Si son 11 o 10, el mínimo es de cuatro locales. Se define como jugadores de formación local a aquellos registrados en la federación del club en cuestión durante al menos tres temporadas entre los 12 y 20 años de edad. Muy similar al concepto de ACB. Cumple sobradamente el Unicaja esta premisa.

De los tres canteranos elegidos para completar el roster, Tanchyn ya jugó algún partido en esta pretemporada, en la Copa Andalucía y en el Costa del Sol. Es un ala-pívot de 2.04 metros con buena mano y que este año afronta su último de junior después de debutar con la selección española este verano en el Youth Challenger sub 18. Rubén Vicente, alero de 1.97 metros que llegó desde Mallorca en edad infantil,  afronta su primer año de junior, aunque ya el año pasado fue fijo a las órdenes de Antonio Herrera. Es un tirado de alto calibre que también es habitual en las concentraciones de selecciones españolas de su edad. El tercero es Álvaro Fernández Mena, base junior de primer año (1.88 metros) natural de Granada que ha crecido bastante en el último año, físicamente y en el juego, y que igualmente fue parte del junior el año pasado siendo aún cadete.