La irrupción de Yannick Nzosa ha sido sin duda una de las pocas buenas noticias de la temporada para el Unicaja. El joven pívot es el brote verde de un curso sin brillo, lejos de los objetivos y en el que el equipo fue incapaz de clasificar para los play off por el título de la Liga Endesa.

Días atrás fueron otros jugadores del bloque nacional los que mandaron sus mensajes tras la errática temporada, hoy era el turno del congoleño. "Termina una temporada dura en la que he cumplido un sueño más, debutar en la élite del baloncesto europeo", escribía el canterano cajista en sus redes sociales, apostando por un próximo curso con mayor normalidad: "El año que viene, a seguir creciendo en un Factor Carpena lleno que nos ayude en cada partido".

En su año debut ha llegado a disputar 40 partidos, promediando 11:36 minutos en pista en los que firmó 4.4 puntos, 2.6 rebotes, 0.8 tapones, un muy a valorar +1.2 en pista y una valoración media de 5. Son buenos registros para el joven del 2003, que dio una exhibición en mayo, cuando se le dieron casi 22 minutos en pista ante el Nanterre 92. El pívot logró 13 puntos, 5 rebotes, 1 asistencia, 1 recuperación, 1 tapón, recibió cuatro faltas y acabó con 19 de valoración. Su margen de mejora es amplísimo esta temporada en la que ganará importancia.

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