Las circunstancias extraordinarias que se vive en la sociedad y el deporte propician que se vean situaciones extrañas, como lo que sucederá con el corte copero, que llegará la próxima semana, tras la jornada del 9-10 de enero. No todos los equipos jugarán los 18 partidos reglamentarios por mor de los efectos del Covid-19 en la primera vuelta y ello propiciará una situación inédita. La clasificación y el billete copero se hará por porcentajes de victorias. Y ello coloca al Unicaja, uno de los equipos que pugna por obtener el billete después de que cinco tengan ya plaza (Madrid, Tenerife, Barça, Baskonia y Burgos), en una posición extraña.

Tras la derrota del MoraBanc Andorra en Baskonia (7-8 de balance) y con el aplazamiento del duelo entre el UCAM Murcia y el BAXI Manresa (8-8 ambos, los perseguidores más cercanos) por los positivos del equipo murciano, el Unicaja aseguraría matemáticamente su presencia en la Copa del Rey si, como parece que será por los protocolos sanitarios, el UCAM-Manresa no puede celebrarse antes del 10 de enero. La ACB fijó esa fecha como tope para dar los billetes coperos, como suele ser habitual. En previsión de que no pudieran celebrarse todos los partidos, como sucederá tras los positivos masivos en el Obradoiro y el UCAM, fijó que se accedería por el porcentaje de victorias que tuviera cada equipo.

Es decir, el Unicaja tiene 9-7 ahora mismo. El UCAM tiene partido en Madrid la próxima semana (domingo, 20:00 horas), pero la celebración está en duda ahora mismo. El BAXI Manresa recibe al Barcelona (sábado, 20:45 horas). El máximo que podrían llegar a sumar sería 9-8. Lo mismo que el MoraBanc si gana sus partidos ante el Madrid, este lunes, y el Fuenlabrada, el domingo. Se suspendió el aplazado con el Obradoiro entre semana. Si el Unicaja gana en Burgos ya estaría 10-7 y superaría en cualquier caso a sus perseguidores al final de la jornada 19. En cualquier caso, quedaría la bala, aun perdiendo contra el Baskonia, de que los rivales perdieran.