Chris Duarte se machaca para llegar bien a Málaga

Chris Duarte trabaja en silencio para poner a tono su espalda. Y en el Unicaja se está al tanto sobre cómo evoluciona el dominicano en esa zona dolorida. Habrá que esperar a un examen más preciso cuando el jugador llegue a Málaga, pero es buena noticia ver al jugador a estas alturas en el gimnasio, aprovechando sus vacaciones para hacer ejercicios con banda elástica, concentrado para fortalecer esa zona lumbar de su espalda. Una herramienta básica y eficaz en la rehabilitación, parte fundamental de una rutina para recuperar fuerza y flexibilidad. El Unicaja, desde el staff de Ibon Navarro, aprueba y controla esos trabajos de recuperación, señal de que se va avanzando poco a poco. Y por parte del jugador, el acelerar ese regreso pese a que acabó su participación en Puerto Rico, un asunto de estado en el país boricua, en concreto en Bayamón, el todavía hogar de Duarte.

Duarte no jugará la Americup con su selección. Aún no tiene billetes y fecha exacta de llegada a Málaga, pero la idea que se ha hablado es que el alero llegue para el inicio de los entrenamientos, previstos para el 21 de agosto. Desde el 16 se irán realizando pruebas a los diferentes jugadores. No hay prisas con él, de hecho ahora se privilegia el descanso físico y mental tras un periodo emocionalmente intenso en el que en la isla ha sido seguido con mucha intensidad. Va a tener 10 días de vacaciones después de unos meses en los que ha jugado mucho pero ha entrenado poco. El jugador se hizo unas pruebas en Puerto Rico para ver el estado de su espalda y fueron recibidas en Los Guindos. Resultaron tranquilizadoras y no se observa ningún problema grave, parece una lumbalgia, pero se aguarda con prudencia a su llegada a Málaga para realizar una exploración más completa para despejar cualquier duda. James Webb y Emir Sulejmanovic, de los fichajes, sí estarán esos días, mientras que Castañeda estará en el Eurobásket con Bosnia.

El hecho de que Duarte no pueda participar en la Americup por estos problemas de espalda permitirá al jugador descansar y venga con menos carga y también que su adaptación a Málaga sea más progresiva. No hay necesidad de que esté para jugar en Melilla o en el Costa del Sol, pero puede ir conociendo compañeros y manera de trabajar y también adaptándose a la metodología particular de Ibon Navarro y su staff, que físicamente ha potenciado el estado de distintos jugadores que venían con recurrentes problemas físicos, como Tyson Pérez o Killian Tillie.

Queda poco, pues, para ver por Málaga al fichaje estrella del Unicaja para la próxima temporada, que ha despertado mucha ilusión pero con el que se pide desde dentro prudencia y paciencia para adaptarse a otro baloncesto. El ejemplo de Balcerowski, a fuego lento en su primer año en Málaga, está reciente para interpretar esos tiempos de integración. Libro en blanco tras una etapa dulce en Puerto Rico pese a quedar apartado de la final. Como decía Duarte en su despedida, antepone su salud para garantizar su plenitud en el corto plazo.