El confinamiento obligado de los deportistas depara escenas curiosas, como las que se ven a través de las redes sociales. Eso sí, también tienen las suerte de tener espacios más grandes con frecuencia. Pero todos intentan no caer en la rutina sin ejercicio, algo que al deportista de élite suele costarle trabajo.

Un ejemplo es el capitán del Unicaja, Carlos Suárez, que exhibía cómo se preparaba son su pareja sobre los hombros y haciendo sentadillas en el jardín de su casa. También Adam Waczynski mostraba a su hijo encima mientras hacía flexiones.

El Unicaja sigue parado hasta nueva orden, contemplándose incluso un escenario de final de competición en la ACB. Sucede que quedaría por resolver la Eurocup, en la que hay más motivos para aguardar al desarrollo final de las competiciones.