15 años atrás, Chus Mateo saboreaba el único título de Copa de la historia del Unicaja como parte del cuerpo técnico de Sergio Scariolo. Allí estaban Paco Aurioles, Ángel Sánchez-Cañete y Mario Bárbara, aún hoy en el Unicaja. El ahora ayudante de Pablo Laso mandaba un elegante mensaje a través de las redes con destino a los aficionados y al club malagueño.

"Me gustaría felicitar a mi antiguo club y en especial a mis ex compañeros del cuerpo técnico del Unicaja por alcanzar la final de la Copa del Rey. Ojalá pronto tengan la oportunidad de competir por títulos. En mi corazón estará siempre la ciudad de Málaga y su magnífica afición", decía Mateo, que vive ahora en el Madrid, club desde el que llegó al Unicaja, una época dorada del club blanco. 

Mateo vivió otras dos etapas en Málaga además de la primera. Una como segundo de Scariolo tras ganar la ACB y marcharse a Zaragoza como primer entrenador para regresar después de la Final Four. Y otro como primer entrenador tras la destitución de Aíto y en la que dejó paso a mitad de la temporada siguiente a Luis Casimiro.