Final Four de BCL: cuatro equipos con la flecha hacia arriba

La Final Four conjunta a cuatro equipos de un nivel inmenso, acorde al desarrollo de una competición cada vez con más adeptos, pasando por la derecha a una Eurocup devaluada, y con un techo aún difícil de presagiar. Se ha ganado el Unicaja esa etiqueta de máximo favorito, al margen de ser sede, por el bagaje reciente de los malagueños, con once victorias consecutivas hasta el traspié, esperado, en el WiZink Center, especie de asterisco por el contexto, pero es una fórmula que ya dio resultado óptimo en Badalona, se tocó plata con dos derrotas en ACB como preámbulo. Es un cumplido con el que hay que lidiar ante el Bonn, ya manifestaban los alemanes tras el sorteo que intentarán jugar con ese factor; un equipo que llega lanzado a Málaga, líder absoluto en la Bundesliga, y cada semana limando unos detalles similares a los cajistas.

Diez victorias seguidas para los de Tuomas Iisalo, el técnico de moda en Alemania, mejor entrenador de la temporada en Liga; y con un TJ Shorts que, además de ser nombrado MVP de la competición, de la BCL de forma virtual, hizo 30 puntos y 36 de valoración ante el Ulm, el último examen de los germanos, MVP de la jornada incluido. Desde que cayeron con Estrasburgo en el primer partido de los cuartos de final, todo han sido triunfos, con algunos resultados escandalosos (la diferencia media de sus últimas diez victorias es de 17 puntos); ya se mira en Málaga con otros ojos, un medidor de respeto que ha ido aumentando por lo lineal que se ha mostrado desde que quedó emparejado con el Unicaja. Tendrá que que rondar el sobresaliente el anfitrión, ante un equipo nada acostumbrado a perder. 32-2 en Liga y rompiendo barreras, ni el Bayern o ALBA han firmado ese registro en las últimas temporadas, que además se une a una competición que ha dado varios saltos económicos, por ello cualitativo.

Pero se tiene que atisbar la otra parte del cuadro, en caso de llegar a la final, con un Hapoel de Jerusalén que llega en un estado brillante, de ganar el pasado fin de semana a Maccabi de Tel Aviv (83-76), y seis victorias seguidas, y 19 triunfos en los últimos 21 partidos, otro participante por lo tanto enrachado; acompañados de unos 2.000 israelíes que aparecerán en el Carpena, con otra gran cuantía en Málaga, viajarán sin entrada. Tercero en Liga, a solo dos triunfos del liderato, y también campeón de Copa, en una competición hebrea cada vez más abierta, pero donde Maccabi mantiene ese monopolio, al menos como único club con vitola Euroliga.

Y un Lenovo Tenerife que se mantiene sólido, pese a todos los problemas físicos de las últimas semanas, ha vuelto a retomar ese nivel brillante con el que llegó a la Copa. Quitando el accidente ante UCAM Murcia, que ha dado alas al Unicaja por la cuarta plaza, son seis victorias en los últimos siete partidos, aumentando sus prestaciones en el último tramo de competición; siempre fiables los de Txus Vidorreta, sigilosos, sin hacer ruido, peligrosísimo como siempre, ya experto en estas semanas. Rival de los malagueños hasta en la sopa, ya con ese play off confirmado en Liga Endesa.

Se cumple además que los equipos ya han sumado títulos esta temporada, a excepción del Bonn, con un liderato en Bundesliga como si lo fuera. Unicaja y Hapoel como campeones de Copa, mientras que Lenovo se alzó con la Intercontinental, otro de los premios al ganador de esta BCL, la posibilidad de optar a ella en septiembre. Buenos nombres, cuatro equipos que ya se asociaban a principio de temporada como candidatos muy serios a esta Final Four, y todos con la flecha hacia arriba.