La baja de Alberto Díaz presuponía una coyuntura difícil para el Unicaja, complicada de paliar; pero Ibon Navarro vuelve a hacer de la necesidad una virtud, siempre se han encontrado fórmulas para que el equipo mantenga su esencia, hasta con la ausencia de un jugador tan importante como el capitán. El último acierto ha sido colocar a Tyson Carter como base, recurso de emergencia, con un resultado óptimo, por encima del esperado; y ya con tres partidos disputados sin Alberto, se puede extraer la conclusión de que es más que un parche. Sigue madurando el MVP de la Copa, se valora desde el club cómo ha ido su evolución en los últimos meses, con unos comienzos que fueron dificilísimos, pero cada semana extrayendo más recursos en su juego, alguien especial, de los más preciados de la plantilla a nivel de talento.

Ibon Navarro analizaba ese movimiento tras la victoria frente al Obradoiro. "Nos ha sorprendido el dominio que tiene Tyson a la hora de controlar el juego, a nivel de saber qué tiene que mandar, identificar dónde pueden estar las ventajas, a nivel de preocuparse también del tiempo de posesión para elegir una jugada más corta o más larga. Nos ha sorprendido para bien, muy para bien, entonces estamos muy contentos. Vale, es verdad que tenemos que tratar de esconderlo un poco más atrás, ya le cuesta un poco más, viendo además cómo tenía el tobillo, presionar el balón a todo campo. Sin embargo, ha hecho unos minutos magníficos con Kassius Robertson en defensas de uno contra uno, con lo cual estamos muy contentos con él, pero siempre tenemos la opción de Mario y Djedo, aunque no se sientan excesivamente cómodo, pero tampoco Tyson y lo está haciendo muy bien. También poner a Tyson Carter de base genera unos problemas que Alberto no genera; con Darío o Tyler al lado, ya tienes dos focos ofensivos muy importantes, también con el problema que eso genera en el rival".

Estuvo sobreprotegido Carter a principio de temporada, el evitar en la medida de lo posible que pudiese jugar de '1', con unas condiciones que en su día le hacían sufrir. "Quiere ayudar donde no es bueno, que es jugando en el puesto de base", llegó a decir Ibon Navarro públicamente en Antequera durante la pretemporada, mensaje en su día chocante. Pero logró el de Misisipi ir poco a poco desarrollando ese entendimiento del juego, también lo tiene, porque es un jugador que ofrece diversas soluciones. Incluso cuando regrese Alberto Díaz, puede suponer un recurso para quedarse, con un calendario que implica el controlar esas famosas cargas, de los términos más empleados por el técnico en las últimas semanas.

11 puntos y 4 asistencias, estando tocado del tobillo derecho, aún renqueante, pero hizo el esfuerzo para ayudar al equipo ante los gallegos. Hasta eso sale. Tras la Copa, como la mayoría de la plantilla, tuvo momentos de oscuridad, lejos del nivel de Badalona, pero se le ve nuevamente fino, rápido en los movimientos. El huracán que ya ha asomado en Málaga, ahora evolucionado. El club trabaja en su continuidad, sería la joya de la corona.