El Joventut de Badalona SAD, próximo rival del Unicaja en la ACB, cerró el ejercicio 2020/2021 con 2.183.000 euros de déficit a consecuencia de la falta de patrocinador y por la ausencia de ingresos por venta de entradas y abonos en el Palau Olímpic debido a la pandemia de la COVID-19. Un escenario que se está dando en otros clubes también. Los 32 accionistas que participaron en la Junta General Ordinaria de la sociedad anónima deportiva celebrada este lunes en el Palau Olímpic de Badalona aprobaron las cuentas del pasado ejercicio, en el que el club tuvo unos ingresos de 2,8 millones de euros, 1,2 millones menos que en el de 2019-2020.

El presidente del consejo de administración, Juanan Morales, calificó de "durísimo" el pasado ejercicio en lo económico y afirmó que la situación del club "no es desesperada, pero queda mucho trabajo por hacer y trabajar muy duro para que sea sostenible y autosuficiente". Morales destacó ante sus accionistas que la sociedad anónima deportiva ha reducido "en un millón de euros" la deuda histórica del club y que éste es "el camino a seguir en el futuro".

La deuda actual del Joventut de Badalona SAD es de "unos cinco millones de euros", de los que 2.4 millones corresponden a los acuerdos para salir del concurso de acreedores en 2012 y 2.5 millones a préstamos de Scranton, el accionista mayoritario de la entidad, al club para acondicionar el Palau Olímpic para la celebración de conciertos y para dotarle de liquidez durante la pandemia. Juanan Morales comentó que al club le ha "ayudado mucho para llegar hasta aquí" la ampliación de capital llevada a cabo en el pasado ejercicio y suscrita casi toda por el accionista mayoritario. Con esa ampliación el capital social de la SAD ha pasado de 4.9 millones a 8.6 millones.

En el terreno deportivo, Morales dijo que la temporada pasada del primer equipo de la Penya fue "buena". "Pero nos quedamos a las puertas de hacer una muy buena temporada. Tenemos que ser exigentes y la temporada pasada nos quedamos con ganas de más, aunque mejores los resultados de la anterior", señaló. Sobre el capítulo de ingresos, Morales se congratuló de que a partir de este jueves vuelvan a celebrarse conciertos en el Palau Olímpic tras la reforma hecha en la instalación y recibir los permisos necesarios.

La explotación del Palau Olímpic y los ingresos por la misma será para el Joventut de Badalona SAD y servirá para amortizar a lo largo de 10 años el crédito que recibió de Scranton para acometer las reformas de la instalación. Los accionistas preguntaron por la falta de aficionados en los partidos que el Joventut juega en Badalona y el presidente del club desveló que en algunos encuentros "no viene el 20% de los abonados", que cifró en 4.500.