Chispazos de varios jugadores. Jaime, Cole, Eric, Alberto... Pero escasa continuidad ofensiva y demasiados boquetes defensivos. Lógica la derrota ante un equipo superior en casi todas las facetas del juego.

Jaime Fernández (*)

Mejor en la primera mitad que en la segunda. 10 puntos y dos asistencias, por debajo del nivel celestial en el que ha arrancado. Es cierto que generó no pocas situaciones para tiros abiertos que sus compañeros no cerraron.

Jonathan Barreiro (*)

Más tiempo como tres debido a la lesión de Bouteille. Intentó hacer cosas diferentes, metió canastas buenas alternadas con algún error.

Darío Brizuela (s. c.)

Apenas tres minutos en pista durante la primera mitad. Salía de lesión y Katsikaris no le vio con ritmo para darle más. Sufrió una técnica.

Alberto Díaz (*)

Si hubo alguna opción de remontada fue porque el pelirrojo metió tres triples, intentando negar la derrota malagueña. Tuvo el peor +/- del equipo (-18).

Francis Alonso (-)

Jugando minutos como tres intentó aportar otras cosas al equipo distintas a las habituales. Dani Pérez le metió dos triples claves para sellar la victoria.

Tim Abromaitis (*)

El estadounidense cometió una antideportiva de arranque. Menos brillante que en los últimos partidos. Reboteó (siete, el que más). Aprobado.

Norris Cole (*)

Anárquico, con momentos deslumbrantes y con otros desesperantes. Por números, un partido notable, con 17 puntos, seis asistencias y tres robos. Pero parece difícil que sea regular.

Rubén Guerrero (s. c.)

Una rotación en el tercer cuarto y poco más, apenas tres minutos. Llevaba línea ascendente pero esta vez no tuvo protagonismo.

Yannick Nzosa (-)

Sufrió el joven congoleño, uno de los partidos en los que más. No leyó bien los ataques rivales con el bloqueo. Algún tapón marca de la casa.

Carlos Suárez (*)

Una rotación en la primera mitad para el capitán en su proceso de regreso al bloque.

Micheal Eric (*)

Desatado en el segundo cuarto, con minutos buenos en ataque. Después, menor. 12 puntos y ocho rebotes.