Olek Balcerowski, el quinto fichaje del Unicaja

Llegado ya en septiembre de 2024, casi para montarse ya en el avión para Singapur y jugar la Intercontinental, el fichaje de Olek Balcerowski se produjo la temporada pasada pero, tras un adaptación que quizá fue más larga de lo que se esperaba, estaba enfocado a una oportunidad de mercado que apareció y más para ser productivo en el medio plazo. Hecha esa mili, el polaco ha rendido bastante bien en los dos últimos meses de campaña y ahora se apresta a vivir una de consagración. De alguna manera, es también el quinto fichaje.

Balcerowski se ha quedado en Málaga para el inicio de las vacaciones. Tiene previsto estar hasta finales de julio, cuando ya se incorporará con Polonia para jugar el Eurobasket. Estuvo en el Campus de la Diputación en Cómpeta, también lo hará en próximas fechas en el del Unicaja. Como deja ver en las redes sociales, también está realizando trabajo físico para fortalecer su cuerpo. Ha sido uno de los factores más evidentes en los que se le ha visto más campo de mejora, en el contacto en los rebotes, en ser más contundente. Es un proceso en el que hay que equilibrar ganar fuerza sin perder la movilidad que le hace diferencial para su estatura, una combinación poco frecuente para hombres grandes. Absorber mejor los contactos con su altura es un plus para su juego, para facturar cerca del aro.

El hype que hubo con la llegada de Balcerowski fue muy alto, un jugador joven de sus características que venía desde el campeón de Europa, cupo y con margen de mejora aún. Se advertía desde el club que no era un escenario sencillo, más con el panorama de los siete interiores que tenía en la plantilla Ibon Navarro. También se usa, aunque su grado de madurez sea distinto, para alertar sobre Duarte. El dominicano sólo ha jugado cuatro temporadas como profesional, aunque tenga 28 años, salió con 24 de la NCAA. Pero las señales han sido bastante ilusionantes en el tramo final, como con ese tremendo segundo partido de cuartos de final en el Palau, en el que devastó al Barcelona. O muy dignas actuaciones ante el Madrid y Tavares.

Con la marcha de Sima y la llegada de Sulejmanovic hay también más versatilidad, más aire para los cincos. Probó Ibon alguna vez con Kravish y Balcerowski, pero no parecía un encaje muy natural, más por necesidad. Hay aspectos del juego en los que el polaco ha mostrado crecimiento. Se le ha insistido en el tiro y en que lance triples si la posición es favorable. Lanzó 21 triples y metió siete esta temporada. Es un aspecto que le puede dar otra dimensión y condicionar las defensas rivales, la mecánica la tiene para ir cogiendo confianza. También se le vieron progresos en el short roll y en el pase desde el poste bajo. Y atrás mejor lectura y aguante para defensas lejanas y a pequeños. Pero queda mucho para alcanzar el tope que tiene, ser más intimidador y ser más dominante en el rebote. En los tres últimos años jugó en tres equipos diferentes y ahora tendrá continuidad en un hábitat que ya conoce, con unos compañeros que también saben cómo es. En el club se cree mucho en él y en que su rendimiento se multiplicará. Se hizo una apuesta fuerte por Balcerowski y, tras el sembrado de una primera temporada de adaptación, ha llegado el momento de la cosecha. Y él intenta abonar con su trabajo veraniego para llegar en la mejor condición.