Paco Aurioles: "Baba Miller me parece un extraterrestre"

El experimentado entrenador malagueño Paco Aurioles (Málaga, 1968), parte del staff de Ibon Navarro en el Unicaja, también lo fue del histórico equipo de Sergio Scariolo en Málaga, ha vivido desde el interior el trabajo de la España B que tanta atención ha llamado. Jóvenes valores del baloncesto español (nacidos entre 2002 y 2005), algunos desconocidos hasta por gente cercana al deporte, han conformado un grupo dirigido por Jaume Ponsarnau que en cinco días ha ganado a las selecciones absolutas de Costa de Marfil, República Checa y Portugal. Aurioles explica a Málaga Hoy cómo ha sido el trabajo en este tiempo y el trabajo de los jugadores que más han impactado.

Pregunta.-¿Cómo han sido estas casi dos semanas de trabajo con esta España B?

Respuesta.-Sergio, desde que entró a la Federación, estuvo estructurando todas las selecciones y de cara al futuro puso la selección B para rellenar ese hueco para las ventanas y seguir controlando y monitorizando a esta franja de edad que no tiene competición. Llevamos un trabajo estable desde hace 4 o 5 temporadas. Yo estuve, antes de la pandemia, un año en el que Jaume ya estaba en Valencia como primer entrenador y todo lo demás he sido entrado ayudante. Los jugadores estas semanas siempre entrenan muy bien, juegan algún partido, en un entorno amistoso. Este año quería Sergio darle un paso más. Que ellos vivan la experiencia de la selección B como la A. Porque sabe que el cambio generacional va a depender mucho de ellos, de que van a haber muchos jugadores que dentro de poco van a tener que estar ahí de este grupo. Y entonces hemos tenido un régimen replicando tal y como trabaja, entrena y hace el día a día la selección A. En el mismo hotel, con las mismas condiciones, en el mismo pabellón, con todo igual. El staff hemos participado de las reuniones que tiene Sergio con el suyo para preparar los ciclos de entrenamiento hasta el Europeo. Y los entrenamientos y los planes de partido, hemos estado en todas sus reuniones y en todos sus entrenamientos para hacerlo con el método más igual posible al equipo A. Y luego, hemos entrenado y preparado nuestro equipo. Los jugadores algunos han doblado nuestra sesión y la de ellos, 3 o 4 iban rotando y pasando por el equipo de la selección A. Y además hemos jugado tres partidos listos y hemos ganado los 3. Ya no solo por ganar, sino por la sensación de frescura, descaro, intensidad que han puesto los jugadores. Además a un muy buen nivel.

P.-Un equipo favorito al Afrobasket y dos del Eurobasket.

R.-Sí, en todos estos equipos hemos tenido enfrente a jugadores de NBA. Contra nosotros estuvo Krejci y Satoransky también. Portugal también tenía a Queta. Los de Costa de Marfil tienen a jugadores como Costello, élite en la ACB, o Mo Bamba, jugador sólido de NBA. Más muchos que juegan en Francia a un nivel alto. Y bueno, la verdad es que las selecciones eran de primer nivel. Y yo creo que nadie esperaba que estos chicos dieran ese nivel. Todo el mundo pensaba que iban a ponerlo todo de su parte para competir. Pero no que tuvieran este resultado los tres partidos.

P.-Han trabajado con muchos chavales NCAA, que están ahora en formación america. Imagino que también una de las razones de esta selección es por tenerlos controlados.

R.-Sin duda, ahora nosotros tenemos que adaptarnos a esta realidad. Es normal que las condiciones que tienen en Estados Unidos son buenísimas. O sea, económicamente ellos están por encima del nivel de los jugadores de la Liga ACB. Ahora mismo, muchos, a nivel de contrato, están muy por encima de los jugadores de ACB. Entonces tienen que aprovechar este nuevo marco de contratación. Y también porque ya no están yendo a universidades pequeñas, sino que están yendo a la mejor conferencia, a universidades muy buenas, a la Big Ten... Y bueno, hay mucha expectación. Que vengan a vernos los entrenadores de la universidad, observen a estos chavales. Por ejemplo Baba Miller y Jordi van a la misma y el entrenador de Cincinnati estuvo viéndolos. Y bueno, esta es la realidad. Los seguimos desde la lejanía, pero hay que estar atentos para cuando vuelvan.

P.-¿Se les hace seguimiento durante la temporada?

R.-Sí, sí. Yo no me dedico a eso ahora mismo. Otros años sí he estado más siguiendo los jugadores para las ventanas y todo eso, con el staff de Sergio. Ahora lo lleva más el departamento que queda en la Federación de seguimiento. Pero sí que a título personal he seguido a muchos jugadores. Por supuesto, he visto todos los partidos de Folgueiras. Y bueno, hemos seguido a muchos jugadores. Había visto por curiosidad a Great Osobor, pero no lo conocía. Y bueno, me llevé una impresión muy buena. El chico se ha integrado como si llevara con estos compañeros toda la vida. Cuando es de una realidad americana desde hace mucho tiempo que no tiene nada que ver con esto. Y parecía que era un chico que había estado en toda el proceso de formación con ellos. El grupo ha sido fantástico. Y eso da mucha alegría de cara al futuro del baloncesto español, por mucho que se esté yendo a Estados Unidos. Que se puedan volver a reunir me parece una manera de tenerlos controlados. Y ojalá lleguen todos a la selección pronto.

P.-¿Cómo ha visto a Folgueiras después de este año en el que ha sido tan protagonista?

R.-Es diferente el rol tan protagonista que tenía en Robert Morris porque allí era un líder del equipo. Creo que ha dado un salto en seriedad en su trabajo muy importante. Ahora, cuando vuelva de este verano, va a seguir trabajando. Porque en su nueva universidad le están dando un programa para que trabaje físicamente a un nivel más alto. Creo que su baloncesto va evolucionando, está madurando en lo profesional. Ha tenido una buena semana con nosotros, entrenando bastante con la selección A, muy bien. Viendo los pasos, creo que va a tener un gran futuro. Allí ha jugado mucho de cinco, pero su paso es hacerlo de cuatro. Juegan de cinco en su universidad, a lo mejor en la próxima ya no tanto. Aunque es verdad que en Estados Unidos este tipo de jugadores que son tan altos, no hay tantos jugadores altos allí, se les pone de cinco para aprovechar su ventaja en el tiro y en el pase, porque, como Álvaro, tienen un conocimiento alto del juego. Bueno, ha tenido que readaptar su juego de cinco allí al de cuatro aquí porque aquí, en el proyecto de la selección española, sí es un cuatro.

P.-Ha impactado mucho Baba Miller. ¿Cómo lo ha visto? ¿Cómo trabaja en el día a día? ¿Qué posibilidades le ve?

R.-Bueno, a mí me parece un extraterrestre. No quiero compararlo con Pau Gasol, porque estamos hablando de palabras mayores. Pero su impacto es muy grande, tanto en los días que ha entrenado con el primer equipo como en los partidos que ha jugado con nosotros. Desde el primer día contra el de Costa de Marfil. Y es, además, el jugador que, por la lesión de Ndiaye, ha participado siempre. Él no ha rotado. Él ha hecho todos los entrenamientos del equipo. De manera que algunas veces, incluso, no ha entrenado con nosotros, prácticamente no ha entrenado con nosotros para que no se cargara. Solo jugaba. Y me parece que ha intentado adaptarse de una manera increíble. Su adaptación con los compañeros ha sido fenomenal. Yo sí lo conocía de aquí, de España, desde la época del Madrid. Pero a nivel personal me llevé una gratísima sorpresa. Tipo centrado, profesional, todos estos que han elegido ese camino han ganado en seriedad y profesionalidad. Los tíos están enfocados ahora mismo a trabajar para ellos en el futuro.

P.-Hablaba de Osobor, también Nogués es otro jugador que se forma allí que condiciona defensivamente.

R.-Bueno, es un jugador que cambia los partidos. O sea, la vitalidad que tiene... Él cambia los partidos. Sale al campo y desde un rol defensivo ha sido un espectáculo. Desde el primer día, los robos continuos de balón han sido impresionantes. Todos me han gustado mucho, todos. Yo llevo dos años flipando con Adrià Rodríguez y Cárdenas. Por un motivo, porque uno viene de LEB y el otro no ha estado en el radar de nadie. De pronto apareció el año pasado y me parece un acontecimiento único en el baloncesto español. Que alguien aparezca así de la nada con 21-22 años. De haber jugado aquí en Andalucía, en La Zubia, sin que lo conociera casi nadie, a triunfar en Estados Unidos, a venir a selección española, a que lo fiche el Valencia ahora y a que lo ceda en el Peristeri.... Me parece increíble que se haya hecho profesional así en un salto. Adrià se va también a Estados Unidos, me parece un jugador de muy buen nivel que estará seguro también en la Liga ACB. Y porque es menos sorpresa, pero Guillem Ferrando, entre el año pasado y este, ha dado un cambio también en lo profesional, en la seriedad, en lo físico.... Ha tenido mucho acierto. Ha sido el gran capitán del equipo que ha guiado a los demás. La verdad es que Jaume está muy contento y Sergio, sobre todo, porque ha valorado mucho la aportación que ha tenido este equipo. Porque, además, se siente un poco, que es la verdad, como padre de todo esto. Porque los lleva siguiendo desde cadetes, desde infantiles, con los mismos conceptos. Pasando por todas las selecciones, entrenando, de alguna manera, con la misma filosofía... Y desde que creó la Selección B, aquella vez que empezó en el año 2017 en Benahavís, pues hasta ahora yo creo que ha hecho un trabajo, ahora que se despide de la Selección, que me parece que no solo en el primer equipo, que lo ha llevado a estar en el número uno del ranking mundial, sino que a nivel de cantera yo creo que ha dejado un legado muy importante.

P.-¿Cómo es ese hilo común de trabajo desde arriba hasta abajo?

R.-Bueno, en la manera de afrontar trabajo, el tipo de organización, no solo lo técnico, sino el tipo de planificación, tratar a las selecciones como equipos, como la familia, ese mismo concepto. En lo técnico, aunque haya adaptaciones por edad, es muy parecido. Con la idea de jugar en carrera, llegando desde la defensa, pues se empieza a defender de la misma manera desde pequeño, hasta que llegan al primer equipo. Bueno, esto es una guía que tiene mucha continuidad y que ha dado un resultado increíble.

P.-¿Cómo ha visto a Alberto Díaz y Mario Saint-Supéry?

R. -Que dos de los tres bases de la selección española sean malagueños me parece increíble. Cada uno tan distinto, uno veterano y tan aceptado en el equipo, uno es el mayor y otro el más joven. Mario aporta esa juventud que tiene, todavía le queda un camino por delante muy largo para ser un jugador muy sólido en el puesto de base, pero ahora mismo ya su aportación es buenísima y su impacto físico en elequipo también. Desde que ha llegado, con ese entusiasmo que tiene siempre, para suplir a Lorenzo Brown, pues lo ha cogido muy bien y él está trabajando al nivel que trabaja, dándolo todo siempre.

P.-Tras la selección, poco tiempo de descanso y Unicaja en breve, ya a en 10 días.

R.-Tenemos que prepararnos como el año pasado. Vamos a seguir una ruta parecida, a lo mejor algún día un poquito más tarde que el año pasado, pero con el mismo camino de empezar con la Intercontinental y la Supercopa en Málaga. Eso yo creo que nos ayuda a motivarnos pronto, a estar desde el principio con focus, en estar preparados.

P.-Hay cambios pero se percibe ilusión.

R.-Sí, se fueron cinco y llegaron cuatro. Todo el mundo está con mucha expectación ante los cambios, pero nosotros tenemos confianza en que el trabajo que se ha hecho para seleccionar a estos jugadores y con la precocidad que se hizo, los cuatro ya se conocían que iban a estar pronto para relevar los que se fueron. Yo creo que hemos estado muy atentos al mercado y que los que vienen son jugadores que, además de rellenar la parcela que ocupaban los anteriores con parecidas características, llegan todos con un punto de sentirnos más ilusionados en jugadores que pueden dar un nivel también muy alto y bueno, pensando siempre que lo van a dar hasta mejor.

P.-Ha sido un técnico siempre ligado a la cantera. ¿Cómo ve esa Liga U22?

R.-Pues mira, francamente, a mí me parece que es un proyecto buenísimo que a lo mejor podríamos pensar que llega un poco tarde en el baloncesto español porque antes queríamos que hubiera llenado ese hueco, pero que llegue un poco tarde no significa que no haya que hacerse. Es que tiene que empezar lo antes posible, ya. Y al principio todavía habrá que decidir un poco los clubes cómo van a afrontar este tema, pero yo creo que todos lo antes posible tenemos que estar de acuerdo en que es muy importante que tengamos mucha atención sobre estos equipos. La liga final será atractiva y todos tenemos mucha expectativa de ver cómo empieza funcionando, pero estoy seguro de que en el futuro será una liga muy importante y puede hacer cambiar todo esto que está pasando en el baloncesto.