Los dos últimos números uno del draft de la NBA, Zaccharie Risacher y Cooper Flagg, alumbraron Málaga

En el verano de 2022, en los estertores de la época covid, Málaga acogió un Mundial sub 17 de baloncesto masculino. Han pasado sólo tres años de aquello, pero ya se puede pesar el nivel del talento del que se pudo disfrutar en la provincia (Marbella, Alhaurín de la Torre y el Carpena fueron las sedes) en esos días de julio. Para ejemplificar, los dos últimos números uno del draft de la NBA, el francés nacido en Málaga Zaccharie Risacher (2024) y el estadounidense Cooper Flagg (2025), fueron medallistas en ese torneo. El año natural de los jugadores nacidos en 2005 (máximo para ese torneo) para salir en el draft es 2027, pero el proceso se adelanta para las perlas más brillantes y desde los 19 años ya se puede presentar la candidatura. Pero la profundidad de la añada es más potente.

Risacher, nacido en el Hospital Gálvez de la capital mientras su padre, Stéphane, jugaba en el Unicaja, ya jugó esta temporada en Atlanta Hawks y promedió 12.6 puntos y 3.6 rebotes para salir elegido en el mejor quinteto de rookies. Es un salto importante, pero el malagueño intenta adaptarse en un rol protagonista. En aquel verano de 2022 ya sonaba fuerte su nombre y los scouts tenían apuntado su nombre. 10.4 puntos, 4.4 rebotes y 2.6 asistencias promedió en el torneo. Otros compañeros tuvieron, no obstante, tuvieron más brillo. Uno, el pívot (2.13) Alexandre Sarr, que hizo números algo similares (12 puntos y 3.9 rebotes). Fue el número dos del draft de 2024, elegido por Washington Wizards. Curiosamente, el jugador elegido en el quinteto ideal de la selección francesa fue Ilane Fibleuil, que firmó 12.6 puntos y 5.9 rebotes. Eligió marcharse a UCLA, como Aday Mara, y la experiencia salió mal. De regreso, ha jugado en el Poitiers de la segunda división francesa.

La profundidad de la cantera francesa es tremenda. Pacome Dadiet, alero de aquel equipo, fue elegido en el puesto 25 por New York Knicks en 2024. Este año ha alternado con la G-League. Además, Noah Penda fue el pick 32 este año, por Boston, que lo traspasó a Orlando. Y Mohamed Diawara fue escogido en el puesto 51 este año y ha acabado tras un cambio en los Knicks. Osea, cinco de 12 ya están en la NBA, más algunos, como Tidjane Salaun (también 2005), que no estuvo en Málaga y fue elegido sexto el año anterior.

El número 1 de este año 2005 fue Cooper Flagg. Después de una temporada dominante en Duke, el jugador nacido en Maine, que es de diciembre de 2006, ya deslumbró en Málaga con sólo 15 años. Promedió 9.3 puntos, 10 rebotes, 2.9 tapones, 2.4 robos (ocho en la final ante España) y 1.9 asistencias y fue escogido en el quinteto ideal. Se aguardaba su MVP (19.3 de eficiencia, el que más de su equipo), pero se le dio al español Izan Almansa. Flagg es un alero total de 2.06 metros capaz de hacer muchas cosas distintas sobre la pista. Tras la salida de Doncic, un número uno, hay quien no cree en las casualidades, para los Mavericks. En Málaga se pudo observar la versión beta de un jugador total que ahora tendrá el test de la NBA.

En aquel equipo americano también estaba el ala-pívot Ron Holland (11.1 puntos, 6.6 rebotes y 2.4 asistencias en el torneo). Fue escogido en el número cinco del draft por Detroit Pistons. Tuvo ese recordado pique final en el partido por el oro con el malagueño Álvaro Folgueiras. Esta temporada jugó 15 minutos por partido en la franquicia de Michigan y pisó la G-League. Más por debajo del radar en Málaga pasó Asa Newell, interior de 2.11 metros que ha sido elegido por New Orleans en el puesto 23 (después traspasado a Atlanta) en junio tras destacar en la universidad de Georgia. El resto del equipo estadounidense está aún en universidades (Koa Peat, de 2007, acaba de ser campeón del mundo sub 19 y esta temporada empezará), varias de ellas muy potentes y aparecen en los mocks para próximas elecciones.

Del equipo español que tuvo contra las cuerdas a Estados Unidos en aquella final, dominando tres cuartos (67-79 al final), el único drafteado ha sido Hugo González, el menor del equipo que dirigía Javi Zamora. Los Celtics le escogieron en el puesto 28 de este año y el canterano madridista formará parte de la mítica franquicia. Los dos jugadores elegidos en el quinteto ideal fueron el MVP Izan Almansa, no drafteado y que ha jugado la liga de verano con Philadelphia, y Lucas Langarita. Almansa no ha dado con la tecla en sus pasos. El último año estuvo en Australia y debutó con la absoluta, pero ha tenido problemas extradeportivos. Tiene 20 años y mucho camino aún. Langarita fue cedido a Primera FEB, a Oviedo, después de que en Zaragoza no conectara bien con Porfi Fisac tras unos primeros pasos ilusionantes. El gigante de esta generación, Aday Mara, eligió la vía americana y sus dos años en UCLAno han sido productivos en juego, sí ha cambiado su cuerpo. Ha pasado a Michigan. Conrad Martínez (Arizona), el malagueño Álvaro Folgueiras (antes Robert Morris, ahora Iowa) y Lucas Marí (Vermont desde este año) también juegan en la NCAA. Sergio de Larrea formará parte de la selección de la Eurobasket tras un muy notable año en Valencia. El base pucelano era el talento latente de aquel equipo, acabó algo perdido en la rotación pero sus cualidades están ahí. Será drafteado con altísima probabilidad más adelante. Por edad pudo estar Mario Saint-Supéry, pero la FEB prefirió que el malagueño liderara a la sub 16 un mes después en el Europeo. Fue MVP del torneo. El resto del equipo está en categorías FEB.

Además de ellos, jugó el australiano Rocco Zikarsky (2.21 metros), al que España tuvo que tumbar en cuartos de final y que ha sido elegido el mes pasado en el puesto 45 por Chicago Bulls y el serbio Bogoljub Markovic (número 47, en Milwaukee tras un traspaso). Otro serbio, Nikola Topic, se perdió el Mundial por lesión y fue escogido el número 12 por Oklahoma en 2024. Un 10%, de mucha calidad, de los dos últimos drafts, estuvo en Málaga. 2027 es el año natural de elección en el draft de los nacidos en 2005. Entonces se podrá tener un mapa completo de cómo fue el aluvión de talento que se pudo ver en la provincia.