El Unicaja celebra la Copa Intercontinental con la afición

El Unicaja ya se encuentra en Málaga tras una vuelta interminable desde Singapur: unas 20 horas por el aire y una escala en Estambul que incrementó aún más la fatiga en la expedición malagueña. Un aterrizaje programado para las once de la mañana, pero pisó tierra unos minutos antes, con una espera de aproximadamente una hora hasta que el campeón de la Intercontinental se dejaba ver por el aeropuerto de Málaga, donde aguardaba un grupo de aficionados. Rostros de cansancio, ojeras prominentes en jugadores y miembros del cuerpo técnico, pero haciendo el esfuerzo por poner buena cara en una liturgia que comandaba Alberto Díaz con ese undécimo título. El capitán malagueño, acostumbrado a estos momentos, aparecía el primero con esa Intercontinental, acompañados en una primera fila de los dominicanos, Tyson Pérez y un Chris Duarte sonriente y con esa sonrisa blanca impoluta que brillaba en la terminal. “El primero de muchos”, dijo Duarte en sus redes, todavía en Singapur.

Una celebración íntima, con Los Mihitas dando colorido y ruido en el aeropuerto desde bien temprano, y con un trasiego de pasajeros donde muchos miraban con sorpresa, como si algo especial se estuviera cocinando. Retumbaba el himno del Unicaja cuando apareció el campeón, con ese grupo de aficionados pidiendo fotografías. Alberto Díaz, Ibon Navarro y Chris Duarte, los más solicitados; también Tyler Kalinoski, que acurrucó esa Intercontinental en algún momento, hasta que el equipo salía del aeropuerto después de esa tanda de fotografías y ese encuentro íntimo con aficionados. Una cosa rápida porque no estaban los cuerpos para soportar tantos trotes. “Una más...”, o el “Ahora a por la Supercopa”, algunos comentarios que verbalizaban esos aficionados, con un Ibon Navarro que levantaba la ceja como podía, o Juanma Rodríguez y el presidente López Nieto, serenos pero parándose en cualquier saludo o intercambio de pareceres.

Momento de retomar el horario habitual y un jet-lag que seguro azotará en las próximas horas. El Unicaja volverá este miércoles al trabajo con una Intercontinental que ya es historia y esa Supercopa tremendamente estimulante. El Valencia Basket, este sábado (18:00 horas), una semifinal de altura en el Carpena, en una nueva oportunidad de romper ese maleficio y tocar plata en Málaga. Es una asignatura pendiente que está ahí y que redondearía aún más este ciclo memorable. “Hemos normalizado en los últimos tiempos los títulos y, bueno, pues no le damos la dimensión que tienen, parezcan mayores o menores, pero la verdad es que ganar continuamente es muy complicado porque desgasta”, comentaba López Nieto en Radio Marca antes del regreso. El día 29, ofrenda floral en La Victoria tras el título; y una undécima bandera que se colgará el 4 de octubre ante el Bilbao Basket, inicio de la Liga Endesa.