Unicaja-San Pablo Burgos: Un aviso, pero estas también valen (99-91)

En la jungla de la ACB, bajar el pistón equivale a sufrir, normlemente a perder. El Unicaja no salió con los mínimos necesarios de agresividad y concentración y un bravo San Pablo Burgos, motivado tras el cambio de entrenador y con un plan de partido que incomodó muchísimo al cuadro cajista, hizo sufrir hasta el minuto final. Gobernó el cuadro burgalés el duelo durante el grueso del mismo, supo poner las trampas adecuadas para que el Unicaja no aplicara el rodillo y casi lo consigue. Pero sobrevivió (99-91) el Unicaja en un ejercicio de resistencia estimable, tampoco es sencillo gestionar estas situaciones. Un gran Chris Duarte y el cuarto final domoledor de Alberto Díaz y Perry más un oportuno Sulejmanovic solventaron la situación. 7-3 de balance y Valencia que ya se ve.

El Unicaja salió al partido desubicado. Dos faltas rápidas de Balcerowski sacaron de punto al polaco, a día de hoy el interior más desequibrante. La rotación cambió y el San Pablo Burgos estaba cómodo con la propuesta de su nuevo entrenador, Porfi Fisac. Defensa zonal, ataques algo más largos si no había una ventaja clara y castigar las numerosas desaplicaciones defensivas del equipo malagueño, que se ve desnaturalizado cuando no existe esa tensión defensiva que ofrece el rédito de atacar más rápido. También había un punto de indecisión al atacar las ventajas y una inferioridad tremenda en el rebote que no suele ser frecuente cuando el Unicaja está en la pista, ante cualquier tipo de rival.

La realidad era que el San Pablo Burgos gobernaba el partido y se jugaba a lo que proponía, con distancias entre 5 y 10 puntos a su favor. Atacó con 35-43 para subir. El Unicaja oponía a Chris Duarte, constante en su producción para sostener al equipo, pero cuando el rival, aunque sea inferior, tiene más concentración y se emplea con más energía, en la ACB no hay colista que valga, los colores salen. Un correcto tramo final permitió ir 41-43 al final del primer tiempo.

El partido iba a impulsos. Duarte seguía estando por encima en ataque (19 puntos llevaba en el minuto 24), con acierto en el triple, pero era la única vía de producción constante que encontraba el Unicaja, aunque sea opción primaria en los sistemas. Estiraba el Burgos (52-57), igualaba tras el tiempo muerto de Ibon el equipo cajista. Webb alternaba puntos con despistes imperdonables en el rebote o en defensa. Jackson llevaba la batuta del duelo en el equipo burgalés, superando con facilidad poco frecuente a Perry, e iba encontrando soluciones para atacar la defensa malagueña, daba un clínic absoluto imponiendo el plan de su entrenador para acelerar en el marcador de nuevo, con dos triples del pitado por el Carpena Dani Díez (61-70). La sensación era de dominio visitante absoluto, pero ahí volvía Perry con un dos más uno casi sobre la bocina del tercer cuarto (68-71) para dejar el partido en una posesión antes del cuarto final.

Irrumpió (estaba, pero aumentó su impacto) en el partido Alberto Díaz, forzando tres tiros libres en un triple y con un dos más uno corajudo para revertir en el marcador (76-74). Robaba y mataba Duarte, pero repelía el Burgos (78-79), en un partido que ya se encaminaba a un final igualado a falta de cinco minutos. Parcial de 0-6 para el Unicaja para (86-81), pero repelía con un dos más uno el interesante Corbalán. Dos pases de un Perry, ahora sí gobernante, para Sulejmanovic, uno bajo aro y uno para un triple abierto para el bosnio, que celebró de manera efusiva Ibon Navarro con él, disparaba al Unicaja (93-86) para sacar adelante un encuentro trabajadísimo. La selva de la ACB es así, bajar el nivel implica que el rival acecha. Una victoria de mucho valor y la Copa está ahí cerquita.

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