Estudiantes llega a la plaza del Obispo en su recorrido en este Lunes Santo en Málaga

Con la llegada de la Virgen de Gracia y Esperanza a la plaza del obispo, comienza el tradicional acto de la Cofradía de Estudiantes, que transcurre sin prisas ni pausas, como si el tiempo se hubiera rendido ante la solemnidad del momento. El Cristo y la Virgen, juntos en su encuentro con el obispo, parecen fundirse con la historia que la plaza guarda en sus piedras centenarias. El ritmo divino de las oraciones y los cánticos fluye sin interrupciones, acariciado por la brisa que baja desde la Catedral.

Bajo la imponente sombra de la Torre Sur, la estampa es inigualable. La luz del atardecer se filtra entre cada detalle, creando destellos dorados que bañan cada rincón. Todo se detiene en un instante de recogimiento, donde la Semana Santa y la Iglesia se funden en una armonía perfecta. En este espacio, suspendido entre lo terrenal y lo celestial, la ciudad vive una vez más su veneración más profunda, sin la urgencia del tiempo ni la lluvia, que parece que no hará acto de presencia.