Uno de los bases que monitoriza el Unicaja, como apuntó semanas atrás La Opinión, es Kyle Fogg (1.91 metros y 26 años), que ha promediado con el Eisbären Bremerhaven 18.2 puntos, 3.7 rebotes y 3.2 asistencias por partido en la Liga de Alemania, en la que ha sido el máximo bombardero.

El Unicaja debe decidir si en esa posición se invierte para la próxima campaña en un jugador y Alberto Díaz de segundo base o, lo que es más probable, dos de nivel semejante con el canterano como tercero de partida. Y Fogg, que la pasada temporada estuvo a punto de jugar en ACB si se hubiera aceptado el ascenso pendiente del Ourense, se ha salido en Alemania.

En una entrevista en Solobasket, Fogg dice que "es un verdadero honor para mí ser relacionado con equipos de una de las mejores ligas del mundo". El jugador californiano ya quedó eliminado con su equipo y espera que se dilucide su futuro para la próxima campaña.