La Santísima Trinidad veterana y poco más

En estos momentos delicados en los que las piernas se encogen y falta el aire en los pulmones, los jugadores veteranos dan empaque a un equipo. La Santísima Trinidad en la que se apoya este equipo la forman Willy Caballero, Duda y Roque Santa Cruz. El primero en defensa, los otros dos en ataque. La mayoría de los puntos que se obtienen vienen por ahí. Por las manos de Willy, la bota izquierda de Duda y la cabeza de Roque. Pobre bagaje para un equipo que debería tener más recursos. Pero los efectivos de verdad, se está demostrando, son ellos tres. El resto tiene que mejorar, por más que Antunes surta de buenos balones o Camacho sea básico para el equilibrio.

Los fichajes invernales no han mejorado sustancialmente lo que había. Iakovenko y Amrabat fueron los titulares y ninguno intervino en ocasiones de peligro más allá de un buen disparo, su mejor arma, del ucraniano. El marroquí amaga más que da. Pablo Pérez tampoco aporta soluciones diferentes a lo que existía en el medio del campo.

No es cuestión de sentenciar a nadie porque todos pueden ser necesarios para sacar adelante una situación complicada. Tener una base de rendimiento asegurado con tres jugadores del calado de Willy, Duda y Roque está fenomenal. Pero si el resto no suma más de su parte estará complicada la salvación.