El equipo ya se encuentra en Porriño
Hay más de 900 kilómetros de distancia entre Málaga y Porriño, localidad pontevedresa en la que se disputará la Copa. Un camino que el Clínicas Rincón recorrió durante la pasada madrugada en autobús, para llegar al inicio de la mañana a su cuartel general. Allí, las de Diego Carrasco descansaron para afrontar unas emocionantes próximas horas.
Lo serán porque esta Copa es diferente al resto. Desde su presentación, la organización ha querido promover al balonmano femenino y a los equipos que buscarán el titulo en tierras gallegas. La difusión mediática es la más alta que se recuerda.
La paliza que supone recorrer España en autobús fue mucho más amena para las jugadoras con respecto a otras ocasiones. Sin ir más lejos, el Clínicas ya se desplazó el pasado fin de semana a Pontevedra para jugar ante Guardés. En este caso, la ambición y la ilusión es diferente. Un debut así bien lo merece.
Durante el día de hoy todos los equipos tendrán una primera puesta en escena con la recepción oficial de los participantes. Una toma de contacto entre jugadoras, cuerpos técnicos y demás personalidades que engloban el torneo copero. Tras el almuerzo, está previsto que el conjunto costasoleño entrene una hora -de 18 a 19- en el Pabellón Municipal.
Cuando lo hagan, las jugadoras de Diego Carrasco estarán a menos de 24 horas de saltar a la pista para enfrentarse a Zuazo, en un duelo que marcará un antes y un después para el club presidido por Carmen Morales. Un choque que desde primera hora de la mañana prepara el Clínicas en la sede de la Copa.
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