La nueva dieta de Borja Vivas

Borja Vivas sigue ingiriendo entre 3.800 y 4.000 calorías al día. Un hombre de su edad no requiere más de 2.500. Pero su morfología y el duro trabajo al que somete a su cuerpo requiere esa gasolina. Pero en los dos últimos meses el laureado lanzador de peso malagueño ha cambiado su dieta. Conoció al nutricionista Paco Jaime, que también colabora con el Málaga y el Unicaja, y le dio unas pautas. Realizar cinco comidas al día, equilibrar la dieta con variedad. Y el resultado es que en los últimos dos meses Borja Vivas ha pasado de 146 a 140 kilos. Seis kilos menos para ganar rapidez. "Más que un régimen, se trata de comer sano. Y me encuentro mejor, sin haber perdido fuerza. Quería ponerme más rápido, sin perder la masa muscular", explica Borja Vivas sobre los motivos del cambio: "Se intenta mejorar la velocidad, que es una cualidad que vas perdiendo con la edad. Y por los tests que he realizado estoy lanzando más o menos igual.

"Sigo comiendo entre 3.800 y 4.000 calorías pero estoy perdiendo peso", señala el lanzador de peso de Carranque: "Tenemos la mentalidad de hacer desayuno, almuerzo y cena y tenemos la creencia de que por comer más veces va a ser peor. Y no es así. Ahora hago cinco comidas al día. Como la pasta integral, más fruta. Antes me basaba en las proteínas y estaba flojo en otro aspectos. Es un equilibrio para que estés más fuerte. Si no tomas azúcar, por ejemplo, estás flojo. Estoy controlado en ese aspecto. Ahora lo llevo a rajatabla, con los horarios correspondientes. Toda la familia se ha adaptado también y así estamos. No me privo de nada, pero por ejemplo los paquetes de patatas que me comía pues ya no. Y una vez a la semana hay carta blanca para disfrutar. He perdido seis kilos pero he ganado dos en músculo. La verdad es que te cambia la mentalidad y uno intenta ser disciplinado para ganar en otros aspectos".

Vivas tiene ya perfilada la temporada invernal. Las molestias en el psoas que le hicieron sufrir mucho en la segunda parte de 2015 y mermaron sus marcas han desaparecido, aunque tiene que realizar unos ejercicios de prevención para que no se reproduzcan las molestias. "A principio de temporada aún estaba algo molesto, pero ya han desaparecido", explica al internacional español, que tiene mono de competición: "Quiero quitarme las malas sensaciones con las que acabé 2015. Me falta la confianza que sólo te da competir bien".

Borja viaja hoy a Madrid para participar en la gala de la RFEA, en la que se otorgan los reconocimientos a los mejores atletas de la temporada pasada. Pero su debut es inminente. El próximo miércoles 20 realizará un control de lanzamiento en su pista habitual de entrenamiento, Carranque. Su pretensión es realizar ya la marca de 20.50 metros que se exige para estar en los Juegos Olímpicos de Río y ya focalizar la preparación para estar en la mejor forma de su vida para mitad de agosto. Después hará otro control en la pista cubierta de Antequera el 30 de enero, lanzará en el prestigioso mítin de Karlsruhe (Alemania), parte de la Diamond League de pista cubierta, el 6 de febrero, repetirá en Gante (Bélgica) el día 13 y después tendrá otras dos semanas competitivas por perfilar. Para la primera semana de marzo está el Campeonato de España en Madrid y el día 15 tiene el Mundial en pista cubierta en Eugene (EE.UU).

"Mi objetivo es conseguir la mínima en la pretemporada", dice Borja: "La ilusión es hacerla el miércoles en Carranque, pero mi entrenador dice que lo realista es que debe salir a mediados de febrero. A Londres fui con 20.00, ahora hay que hacer 20.50, esa marca en Río es final olímpica seguro, pero quieren quitar competidores". Vivas pone la vista en Río. Pero con buenos alimentos.