El reino de Isco

Thiago Alcántara metió tres goles en la final y eso pesa. Pero el Europeo sub 21 de Israel'13 lleva bordado el nombre de Isco Alarcón, erigido en figura de la selección española de la categoría que sigue de manera ilusionante las huellas de la bicampeona de Europa y campeona mundial a nivel absoluto. El triunfo por 2-4 ante Italia, rubricado por un penalti transformado por el malagueño, permite gritar otra vez que España posee el secreto del fútbol de selecciones. Nadie gana más en el último lustro.

Ha sido un campeonato fabuloso del mago del Arroyo, que sale de Jerusalén encumbrado, más si cabe, tras una extraordinaria temporada en el Málaga, en la que se ha consagrado como un jugador especial, diferente, llamado a ser una referencia en el concierto mundial. El premio de Golden Boy (mejor menor de 21 años en Europa) recibido en diciembre entronca con este título europeo, el primero que consigue a nivel de selecciones. Y con Isco de líder de un grupo que revalida el título de 2011 y que apila talentos que llaman a la puerta de Del Bosque. Isco ya entró alguna vez y será un fijo a partir de septiembre a poco que le ruede bien las cosas cuando comience la próxima temporada. No era oficial el nombramiento de MVP del torneo, aunque ayer se daba prácticamente por hecho. Isco hace historia también, junto a Ignacio Camacho, que jugó cinco minutos en la final tras relevar a Koke. Son los primeros malaguistas que logran un título para España a nivel sub 21. Alexis o Juanmi campeonaron con la sub 19, pero esto es un hito.

La deslumbrante actuación de Isco, aliñada con tres goles que le valen para ganar la Bota de Bronce tras Morata (oro, con cuatro) y Thiago (tres, plata por tener un pase de gol), le ha puesto de manera inevitable en el foco del mercado mundial como una de las piezas más codiciadas. Real Madrid y Manchester City, con ofertas reconocidas por el propio jugador, se han posicionado para su fichaje. El Málaga espera movimientos concretos en esta semana para vender a su estrella al mejor postor. Obtener esos 35 millones de euros de cláusula es el objetivo, aunque los clubes juegan con la necesidad de vender en Martiricos. El Málaga hasta ahora ha sido firme. Blancos y citizens juegan sus cartas. Heynckes recomienda a Guardiola, cuyo hermano Pere dialogó con Isco para tantear su disponibilidad, que se lo lleve al Bayern. Y el runrún de que el Manchester United pudiera hacer una oferta postrera también crece por momentos.

"Somos campeones de Europa ahora, el futuro ya lo veremos. No me preocupa lo del mejor jugador, no me han dicho nada, lo que me importa es el equipo. Para hablar de mi futuro hay tiempo otro día", decía en la sala de prensa del Teddy Stadium de Jerusalén Isco, al que los periodistas ingleses cuestionaban por su posible fichaje por el Manchester City. "Hemos ganado con un fútbol espectacular. Casi no cometimos errores, el fútbol ha sido justo en la final con el mejor equipo del torneo. Ahora nos vamos de vacaciones, que lo merecemos. Ha sido el final de una temporada realmente brillante", remataba Isco, que hoy vuela a España y mañana será recibido junto a todo el equipo en Madrid por Mariano Rajoy, presidente del Gobierno.

Para el recuerdo queda el torneo de Isco, al que aún le quedaría un ciclo más de dos años como jugador de la sub 21, ese gol con el control imposible y la picada con su pierna mala ante Holanda. Y ese punterazo a la escuadra tras tirar a un par de rivales con un quiebro para liquidar a Noruega y sellar el pase a la final de la Eurocopa, donde remató con un penalti engañando al portero con ese giro de tobillo tan suyo que le permite no enseñar hasta el último momento el tiro. 35 millones de euros parecen justos para el nivel exhibido por el pequeño mago del Arroyo, que, aún como jugador del Málaga, fue capaz de ser el jugador más descollante en una tremenda generación. Él fue el rostro del título de Israel'13. Había quien esperaba un desplante a Platini por la expulsión del Málaga. Isco habló en el campo. Y cómo lo hizo.