Como no podía ser menos, TVE por fin se incorporó como patrocinadora al Festival de Málaga. Era una anomalía que siendo la gran ventana del cine español (el 90% de las películas nacionales que se emiten en abierto en las televisiones nacionales lo hacen en La 2 y en menor medida en La 1), a la vez su mayor impulsora a través de títulos participados, hubiese estado ausente del certamen tantos años.

Un Festival, no lo olvidemos, equidistante en el tiempo al de San Sebastián, y que al haber adelantado definitivamente sus fechas al mes de marzo apuesta por ser el escaparate de preestrenos de la temporada de primavera y verano, del mismo modo que San Sebastián, seis meses después, lo es de la del otoño e invierno.

La jubilación de Maite Pisonero en el Área de Cine de TVE fue muy llorada por el sector, dado que tenía buen juicio y mejor criterio. Esta temporada se incorporó a la misma el andaluz Gervasio Iglesias, del que conocemos su autenticidad y confiamos en que continúe su línea comprometida.

La representación de películas participadas por TVE en la 27 edición del festival malagueño es muy nutrida. En lo que respecta a la sección oficial a concurso no vamos a poner reparos. Estaremos atentos al resto de títulos, como Matusalén, Por tus muertos, Puntos suspensivos, El salto, La mujer dormida y Yo no soy esa. TVE debe marcar la diferencia con la línea que marcan las televisiones privadas. Por algo es una cadena pública. Veremos.

Los documentales sí transpiran garantía de calidad: Mis ganas ganan: La historia de Elena Huelva, Marisol, llámame Pepa, Ullate. La danza de la vida, La primera mirada, Samuel: Hollywood vs Hollywood, ‘Summers, el rebelde y Ouka Leele. El viaje de una estrella.