La Aduana, clave para solventar el problema de los casetones eléctricos en la 'esquina de oro'
La inclusión del museo como 'cliente' abaratará la instalación necesaria, valorada en 1,4 millones
El Palacio de la Aduana puede convertirse en clave de la solución al problema que desde hace casi un año plantean los casetones eléctricos que se levantan junto a la esquina de oro del puerto y que tras no pocas reuniones, se mantienen intactos y sin el camino expedito. La eliminación de esta infraestructura, cuyo impacto visual sobre el entorno es más que apreciable, sólo es factible si previamente se ejecutan una serie de instalaciones, valoradas en 1,4 millones de euros, mediante las que dar suministro energético a los locales y comercios de Muelle 1 y otras instalaciones del puerto.
Y en su elevado costo radica el problema. Por ello, la opción de alcanzar un acuerdo con la administración responsable del futuro Museo de Bellas Artes y Arqueología (la Junta de Andalucía) posibilitaría repartir entre un mayor número de actores el montante de la operación. El responsable de la División de Andalucía Centro de Endesa, Alfredo Rodríguez, informó a este periódico de que existen abiertas negociaciones para rubricar ese compromiso, un paso esencial para allanar la resolución del conflicto.
¿Pero cuánto puede suponer el acuerdo de La Aduana? Otras fuentes consultadas indicaron que se trataría de una "cantidad importante", que podría ascender a unos 300.000 euros, cifra más que significativa si se tiene en cuenta que la idea es que en la financiación de esta nueva instalación eléctrica participen también la Autoridad Portuaria, los promotores del centro comercial del puerto y, si fuese necesario, el Ayuntamiento de la ciudad.
Una de las opciones que se manejaba en su día, según recordó el propio Rodríguez, fue la de aprovechar estas instalaciones para suministrar electricidad a futuros desarrollos del puerto, caso del equipamiento deportivo de San Andrés o el auditorio. Muelle Uno requiere de unos 4.000 kilovatios hora. En algunos de los encuentros mantenidos, se llegó a plantear que Muelle Uno aportase del orden de 500.000 euros del coste global, otros 400.000 euros debería conseguirlos el Puerto.
A la espera de que se dé solución a este problema, que el responsable de Endesa estimó podría ocurrir antes de final de año, la realidad es que los locales de Muelle Uno siguen recibiendo electricidad de manera "alegal". Una situación que se acumula desde hace ya once meses, dado que se surten de unas instalaciones implantadas por Endesa de forma provisional y sólo para abastecer el desarrollo de los trabajos de construcción de la denominada nueva calle Larios.
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