Anticipo veraniego

Aunque durante este fin de semana las temperaturas se suavizarán un poco, el calor parece haber llegado a Málaga para quedarse. Tras un comienzo de mes de mayo con jornadas relativamente suaves en lo que a la climatología se refiere, desde esta semana se ha empezado a sentir que la época estival ya está al caer. Durante el día de ayer se vivió en Málaga la máxima temperatura de lo que va de año, 33 grados.

Ello provocó que desde primera hora de la mañana las playas comenzaran a llenarse bañistas, especialmente al mediodía. Playas como La Malagueta o Huelin ofrecían ayer estampas que aveninaban que el inicio de la época estival ya es inminente.

No obstante, los 33 grados que se registraron ayer viernes en la capital malagueña difieren mucho de la máxima de 25 grados que se espera para el día de hoy. Y no sólo se quedará ahí. Las predicciones hablan de una probabilidad del 65% de precipitaciones en la capital para mañana. Pero parece que ese clima suave permanecerá solamente durante el sábado y el domingo. A partir de lunes 2 de junio las máximas temperaturas volverán a rozar los 30 grados, según las predicciones de la Agencia Estatal de Meteorología.

Mientras que en la capital parece que solo existe riesgo de precipitación el domingo, en algunos de los municipios de la provincia se traslada el riesgo también al sábado. Aunque con un porcentaje de probabilidad bajo, rondando el 25%, existe la posibilidad que caigan chubascos durante la jornada del sábado en municipios como Frigiliana, Álora, Antequera o Benalmádena, entre otras localidades.