La Costa del Sol encara la cuesta del Brexit, una de las mayores incertidumbres del sector al ser el británico el principal emisor internacional de turistas a Málaga, con los deberes hechos en el verano. Nadie sabe qué ocurrirá a partir del 31 de octubre si finalmente se consuma la separación de Reino Unido y la Unión Europea pero, mientras tanto, la Costa del Sol batió este pasado verano otra vez su récord de turistas e ingresó 7.500 millones de euros, es decir, en torno a una cuarta parte del Producto Interior Bruto provincial en solo tres meses. Un buen aviso a navegantes para aquellos que aún siguen pensando que el turismo es una rémora o que no tiene realmente importancia.

Málaga sumó 7,36 millones de turistas entre junio y septiembre de este año –en el caso de septiembre es una estimación porque aún no han salido publicados los datos oficiales–, lo que supone una nueva marca histórica y un crecimiento del 4% respecto al verano de 2018. Así lo ha asegurado este miércoles el presidente de Turismo Costa del Sol y de la Diputación de Málaga, Francisco Salado, quien ha destacado que “aunque en la Costa del Sol nunca se puede afirmar con rotundidad que el verano haya acabado del todo, porque somos un destino siempre cálido, podemos decir que el verano de 2019 ha sido espectacular e histórico, en el que hemos vuelto a batir récords gracias al crecimiento de prácticamente todos los indicadores”.

En este sentido, ha aumentado la oferta de plazas de alojamiento, la llegada de turistas por el aeropuerto, los viajeros alojados en los hoteles tanto españoles como extranjeros, las pernoctaciones hoteleras, el grado de ocupación, el empleo, los ingresos medios por habitación, o los viajeros y pernoctaciones en los establecimientos turísticos que no son hoteles. Hay que destacar además que el Instituto Nacional de Estadística informa puntualmente de los viajeros y las pernoctaciones realizadas en los hoteles, apartamentos turísticos, campings o viviendas de casas rural, pero todavía no en las viviendas de uso turístico. Teniendo en cuenta que éstas representan, según el propio informe de Turismo Costa del Sol, el 46% del total de plazas ofertadas en la provincia, la presencia real de turistas es todavía mayor.

Se estima que este verano las viviendas de uso turístico ofrecían 180.299 plazas en esta provincia, 57.129 más que entre junio y septiembre del año pasado. Es tal el auge que están teniendo en Málaga las viviendas de uso turístico –como en otras grandes ciudades españolas– que la semana que viene se va a celebrar en Málaga capital un congreso europeo especializado en el que está prevista la asistencia de 600 personas y medio centenar de ponentes.

A la hora de hacer análisis turísticos hay numerosas variables a tener en cuenta. La más habitual es el número de viajeros que van a los hoteles y cuántas noches duermen allí. Es el estilo clásico porque hoy en día las viviendas de uso turístico ofrecen muchas más plazas que los hoteles, pero se mantiene. Entre junio y agosto se alojaron en los hoteles de la provincia de Málaga 1,94 millones de turistas, un 6,8% más que en el mismo periodo del año anterior, que hicieron 7,4 millones de pernoctaciones, un 3% más.

Los extranjeros lideran tradicionalmente tanto el número de viajeros como de estancias. Este pasado verano en los hoteles ha habido 805.471 turistas españoles, un 12,8% más, y 1,14 millones de extranjeros, un 3% más. En el caso de las pernoctaciones, los extranjeros ganan por goleada ya que, al venir de más lejos, suelen quedarse más tiempo. Los españoles hicieron 2,4 millones de pernoctaciones, un 10,5% más, y los extranjeros 4,9 millones, un 0,3% menos. Como puede apreciarse, el extranjero es la principal fuente de negocio de los hoteles de la Costa del Sol si bien este año han batido un nuevo récord gracias al despertar del turista español tras años de sequía por la crisis económica.

El grado de ocupación media ha sido entre junio y agosto del 76%, 1,6 puntos más que el verano pasado, con una estancia media de 3,8 días. El ingreso por habitación disponible (RevPar) en los hoteles malagueños ha sido de 104,6 euros, un 4,5% más que en verano pasado y muy por encima de la media andaluza (79 euros) y española (77 euros).

Varios turistas en un hotel de la Costa del Sol

Más turistas alojados, más ingresos y, afortunadamente, más empleo. Este verano, según el INE, ha habido un millar más de personas contratadas hasta formalizar una plantilla total de 18.000 empleados. Casi un millón de españoles se han alojado este verano en hoteles y apartamentos turísticos en la Costa del Sol, un 13,5% más. Británicos, franceses, holandeses, irlandeses, alemanes, italianos, estadounidenses, belgas, suecos y daneses le siguen en la lista.

El destino llevará a cabo en la World Travel Market (WTM) de Londres acciones "muy potentes", una feria a la que acudirá, además de en el estand de Turismo andaluz, con un expositor propio y con campañas para atraer viajeros. "No podemos quedarnos dormidos, vamos a seguir trabajando por un destino de calidad", ha enfatizado Salado. 

Pese a estos buenos datos, según Salado, hay que ser "prudentes y seguir trabajando en la misma línea de apuesta por las nuevas tecnologías, el 'big data' y la inteligencia de mercado", más aún en un momento "convulso y de mucha incertidumbre" por la previsible salida de Reino Unido de la Unión Europea y con los primeros indicadores macroeconómicos "que hablan de recesión en países como Alemania y de bajada del consumo y del gasto en España y otros países europeos".