El Ayuntamiento de Málaga ya sabe formalmente y por escrito qué es lo que quiere la Delegación de Cultura de la Junta de Andalucía para empezar a analizar la posible realización de nuevos sondeos geoarqueológicos sobre el solar de los antiguos cines Astoria y Victoria. De acuerdo con el documento remitido a la Gerencia de Urbanismo, el departamento autonómico reclama que se le aclaren ciertas cuestiones relacionadas con esta intervención, así como que se le aporte nueva documentación, antes de "poder valorar la viabilidad de la propuesta realizada".

De manera precisa, el documento recoge hasta ocho demandas, incluyendo la justificación de la ampliación de la actividad, así como de la necesidad y la oportunidad de la misma. Sobre este particular, a la espera de la contestación oficial, desde la Gerencia de Urbanismo vienen recordando desde hace días que la necesidad de actuar antes de que sea completamente cubierta la zona de excavación, así como el avanzado estado de la redacción de la memoria arqueológica. Un informe final que debería quedar completado con los resultados de los sondeos planteados.

También se pide concreción de las cuestiones arqueológicas, una estimación de las conclusiones arqueológicas, detalle sobre la tipología y caracterización de estos sondeos, información sobre la metodología a seguir y la ubicación exacta de los sondeos. Y una última petición que se relaciona con la afección arqueológica que pueden tener los citados sondeos.

Según el concejal de Ordenación del Territorio, Raúl López, el plazo para la subsanación de la solicitud es de diez días desde la jornada de comunicación. El edil ha señalado que se va a proceder a contestar a todas y cada una de las peticiones realizadas al objeto de impulsar cuanto antes las actuaciones apuntadas. La contestación de Cultura se produce 18 días después de que Urbanismo solicitase la ampliación de las excavaciones que se han realizado sobre la parcela en los últimos ocho meses.

La decisión del Ayuntamiento de ir más allá de los trabajos ya efectuados se produce ante la existencia de una corriente de opinión amplia, de la que forman parte los grupos de la oposición, el PSOE y Adelante, y uno de los socios del equipo de gobierno, Ciudadanos, que defiende la necesidad de extender la excavación y profundizar más allá de la cota alcanzada hasta el momento, a -5,5 metros de profundidad. Una exigencia que parte de la premisa de que el proyecto de edificación que contempla el Ayuntamiento incorpora un auditorio bajo tierra, con dos plantas, que llegarían a unos 10 metros de profundidad.

La opción de los sondeos geoarqueológicos se considera como la más adecuada para determinar si bajo el punto ya excavado sigue habiendo niveles ricos en restos o, por el contrario, son inertes. En caso de que la respuesta sea favorable a la existencia de nuevos restos, se abriría la puerta a una excavación de mayor entidad. La ventaja de los sondeos, catorce en total, es que tienen una afección mínima sobre lo ya encontrado. Para su ejecución se utiliza una especie de taladro de unos 10 centímetros de diámetro con el que se profundiza en el subsuelo y se extraen restos de las cotas inferiores.

Hasta el momento, según los datos aportados por el equipo de arqueólogos encargado de la operación, el avance de las actuaciones ha permitido sacar a la luz, entre otros, piletas de vino y aceite y varios enterramientos de época romana, correspondientes a los siglos I y II después de Cristo; restos del arrabal musulmán, y más de 300 enterramientos que, según los especialistas, podrían estar ligados a la toma de Málaga por los Reyes Católicos.