La Diputación baraja abrir expediente a la concesionaria de la plaza toros

La Diputación de Málaga ha tomado finalmente cartas en el conflicto que mantienen los hosteleros de la plaza de toros con la empresa adjudicataria y no descarta abrir un expediente informativo a la sociedad concesionaria.

Aunque el equipo de Gobierno de la corporación provincial afirma que las diferencias que separan a los empresarios de los bares del coso taurino y a la adjudicataria es una disputa ajena, la escalada de la tensión y el anuncio de los restauradores de un cierre inminente le ha forzado a involucrarse. Fuentes oficiales de la institución indicaron ayer que en primer lugar están recabando información tanto de los hosteleros como de Coso de Badajoz, sociedad concesionaria de la plaza, sin descartar abrir un expediente informativo si se observan puntos de sombra en la gestión y, especialmente, en la cesión de uso que ha realizado para que se abran locales de restauración.

El diputado de Cultura, Víctor González, se reunió ayer con los empresarios hosteleros de La Malagueta que le expusieron sus dudas sobre la legalidad en la que han sido alquilados estos espacios. Los dueños de los bares temen que se haya producido una cesión indebida del espacio bajo la el gancho de un programa cultural que, en realidad, creen que no existe más allá de una serie de actividades sin continuidad ni ambición con el único objetivo de dar una apariencia de legalidad para ingresar dinero por cánones y alquileres que no revierten de ninguna forma en las arcas públicas. José Cutiño, presidente de la sociedad Coso de Badajoz, no obstante, defiende la solidez del programa cultural y la legalidad del proyecto, denominado Plaza de la Gastronomía.

Frente a la prudencia de la versión oficial, Luis Tapia, hostelero afectado en el conflicto que ayer acudió al encuentro con el diputado de Cultura, informó que Víctor González se ha comprometido a actuar con contundencia y "abrir expediente informativo". "Nos ha indicado que va a revisar el expediente de adjudicación y a hablar con la empresa concesionaria", aunque la respuesta tampoco ha ido más allá. "Le hemos informado de que la situación es grave y urgente, pero no se ha comprometido a darnos una respuesta en ningún plazo". También le han reclamado que les dé una copia de la autorización otorgada por la Diputación a Coso de Badajoz para que ceda el espacio los hosteleros. "En este momento no sabemos si somos legales o no".

Los afectados calculan en 50.000 euros las pérdidas acumuladas por cada puesto desde que abrieron al público a finales de marzo. Esta cantidad corresponde al canon de apertura (en torno a 20.000 euros) más los alquileres (2.000 euros mensuales aproximadamente) y gastos de explotación no cubiertos por los ingresos. El grupo, del que forman parte 11 empresarios, considera de sufren una situación "límite" que no pueden sostener más allá de fin de mes. El 18 de agosto a través de un burofax al presidente de la Diputación, Elías Bendodo, para reclamarle que rescatara la concesión y sacara a concurso público el proyecto gastronómico y cultural. Denunciaban también que habían firmado los contratos con Coso de Badajoz sin conocer todas las limitaciones que implicaba para su actividad el estar en un bien de interés cultural (BIC).

Luis Tapia, por otra parte, ha reconocido que el empresario José Cutiño se ha puesto en contacto con los hosteleros para ofrecerles "condonar el 100% de la deuda procedente de los alquileres a cambio de comprometernos por escrito a no presentar ningún tipo de reclamación".