El Consejo de Gobierno de la Junta de Andalucía nombró ayer, como estaba previsto, a los altos cargos que ocuparán las seis delegaciones del Ejecutivo andaluz en Málaga. Se trata de un equipo con un claro perfil político, claramente vinculado con el proyecto que representa Miguel Ángel Heredia, con experiencia, por lo general, en el municipalismo y en el que se produce una profunda renovación en relación a la anterior legislatura. Sólo repite una delegada.

Los delegados territoriales nombrados ayer, que en parte responden a los nombres que se habían barajado en las distintas quinielas, están encabezados por José Luis Ruiz Espejo, que ocupará la delegación del Gobierno en la provincia de Málaga, que no sólo ampliará sus competencias, al encargarse de las funciones de las consejerías de Administración Local y Relaciones Institucionales; Justicia e Interior, y Hacienda y Administración Pública, sino que además se potenciará su papel de cara a los ciudadanos, así como el de coordinador del conjunto de los delegados para incrementar la eficacia de la gestión. Incluida la figura de nueva creación, un cargo de confianza, que ejercerá las funciones de representación del vicepresidente Diego Valderas, pendiente de ser designado.

Marta Rueda, la única que repite, gestionará Economía, Innovación, Ciencia y Empleo; el ex diputado al Congreso Daniel Pérez se hace cargo de Salud y Bienestar Social; mientras que el ex alcalde de Benalmádena y diputado provincial, Javier Carnero, entra por sorpresa en la lista de los nuevos ejecutivos de la administración autonómica para ocuparse de Agricultura, Pesca y Medio Ambiente. La otra novedad es la incorporación de Patricia Alba, portavoz socialista en el Ayuntamiento de Alhaurín de la Torre y diputada provincial, en calidad de delegada de Educación, Cultura y Deporte. Y como estaba anunciado, Manuel García Peláez será el responsable de la representación de los departamentos en manos de Izquierda Unida, Fomento, Vivienda, Turismo y Comercio. Un nombramiento que también hay que contemplar dentro del perfil muy político del conjunto, en este caso, por su gran implicación en las políticas que impulsa en IU José Antonio Castro.

Desde las filas del PSOE, su secretario general, Miguel Ángel Heredia, destacó sobre los nombramientos que "son personas, todas con formación superior, que han demostrado su cualificación y su capacidad para los asuntos públicos", para añadir que sus objetivos serán "el impulso de las políticas que generen empleo y reactiven nuestra economía, y la defensa de nuestro Estado del Bienestar". Heredia no olvidó el agradecimiento a los delegados que ayer abandonaron sus responsabilidades.

Por su parte, el secretario provincial del Partido Popular, Francisco Salado, tras pedir que los nuevos delegados se pongan a trabajar cuanto antes, para resolver los problemas que están paralizados por la "ausencia" de la administración autonómica en los últimos meses, reiteró las críticas de su partido por la repetición en el cargo de Marta Rueda, a la que acusan de ser la supuesta responsable de la lista negra de funcionarios afines al PSOE. Salado puso en duda el supuesto ahorro que conllevará la nueva estructura periférica de la Junta de Andalucía y señaló que lo importante no es que se reduzcan los cargos de primera fila, sino que el número de nóminas en su conjunto también descienda, "de lo contrario no se habrá producido ningún recorte". Razones por las que se refirió a la necesidad de que el Partido Socialista y la propia administración autonómica den explicaciones.