“El Gobierno cierra las puertas a los estudiantes de Bachillerato Musical”
El director del Instituto La Rosaleda y estudiantes muestran su descontento ante la negativa del Ejecutivo central a la moratoria
Un centenar de alumnos malagueños se ven obligados a cambiar sus matrículas a mitad de curso
El Gobierno anunció el pasado jueves que no concederá a los alumnos de primero de Bachillerato Musical la moratoria para continuar manteniendo las matriculas como las establecieron a principio de curso. En el instituto La Rosaleda, donde una treintena de alumnos compaginan sus estudios en el centro con las enseñanzas profesionales en los conservatorios de música o danza, muestran su negativa ante esta decisión. “No tiene sentido que la nueva Ley de Educación, de carácter progresista, reduzca las posibilidades de estos jóvenes. El Gobierno está cerrando las puertos a los estudiantes de Bachillerato Musical”, indicaba el director del centro David Triguero, quien apunta a que se debe tratar de un fallo en la redacción de la norma.
Desde hace 30 años, los alumnos de 5º y 6º de enseñanzas profesionales en los conservatorios de música o danza podían matricularse de manera parcial en bachillerato, cursando únicamente una de las tres optativas que ofrece cada modalidad. El objetivo del Bachillerato Musical, como se le conoce a este sistema de compatibilización, era reducir la carga de trabajo de los alumnos en los institutos para que pudieran cursar estos estudios preunivesitarios y a la vez continuasen su carrera musical. De esta manera, mantenían dos posibilidades de futuro abiertas: la música y el paso por la universidad. Con la entrada en vigor de la ley Celaá, únicamente los alumnos que estén matriculados en bachillerato de la modalidad de Arte podrán beneficiarse de la reducción de matrícula. Los alumnos que opten por mantenerse en las ramas de Ciencias, Sociales o Humanidades tendrán que realizar el bachillerato completo. Los plazos de aprobación de la ley han provocado que la nueva norma entre en vigor en enero, obligando a los alumnos a realizar cambios en sus matrículas a mitad de curso.
Únicamente los estudiantes de primer curso de bachillerato se ven afectados por la situación, ya que el Gobierno concedió una moratoria para que la ley no se aplicara a los alumnos de segundo de Bachillerato de este año. La Junta de Andalucía reclamó al Gobierno que esta moratoria se extendiera también a los de primero, pero Moncloa la rechazó este viernes.
A efectos prácticos, algunos alumnos del instituto Mare Nostrum y músicos en el conservatorio Martín Tenllado, ya se han matriculado en la modalidad de Arte. “Como quiero estudiar la carrera de matemáticas, estoy asistiendo de oyente a las asignaturas de Bachillerato de Ciencias, la modalidad en la que yo estaba, pero también tengo que ir a las de Arte, por lo que me pierdo algunas horas de conservatorio”, explica Juan Antonio Cortés, quien toca la flauta travesera. Su compañero, Fran Berrocal, ha optado por la misma opción, acudir a las optativas de Arte y seguir de oyente en las de Humanidades. “No sé qué quiero hacer en el futuro, había cogido el Bachillerato de Arte para no cerrarme puertas ni de un mundo ni de otro”, explica el oboista.
El panorama para los estudiantes que se matriculen en los próximos cursos se complica aun más. En Málaga solo una docena de institutos ofertan la modalidad de Arte, por lo que todos los alumnos que quieran cursar el Bachillerato Musical tendrán que matricularse en estos centros. “Nuestro centro contaba con muchos alumnos de este tipo, ya que nos encontramos muy cerca del conservatorio Manuel Carra, por lo que era más sencillo tanto para ellos como para sus familias. Se desplazan varias veces durante el día de un sitio a otro, por lo que no tiene sentido que tengan que irse a institutos que se sitúen lejos de los conservatorios”, explicó Triguero.
De manera excepcional, la Junta de Andalucía ha permitido que este año todos los centros que lo soliciten puedan impartir la modalidad de Arte a estos alumnos, aunque es una solución que caducará en junio. “Estamos ofertando la asignatura de Arte gracias al esfuerzo de los profesores, quienes están trabajando horas de más”, explica Triguero. En el instituto Mare Nostrum han tomado la misma decisión que en La Rosaleda y se está ofreciendo la modalidad de forma puntual.
Los alumnos aseguran que más allá de la problemática están experimentando la sensación de tener que empezar el curso de nuevo. Pepi Flores, madre de músico afectado, explicaba que su hijo se encontraba destrozado anímicamente, ya que le había costado mucho tomar la decisión de seguir con la música mientras cursaba el Bachillerato y que ahora se siente como si todo el esfuerzo no hubiera servido para nada. “No podemos quedarnos solo con la opción de la música, es un mercado laboral complicado en el que si tienes una pequeña lesión en la mano, no puedes continuar”, indicaba la guitarrista y estudiante de primero de Bachillerato Musical Lucía Díaz.
Temas relacionados
1 Comentario