Limasa paraliza la negociación del convenio hasta la resolución judicial

La negociación del convenio colectivo de la empresa mixta de limpieza Limasa se paraliza hasta nuevo aviso. La dirección de la sociedad ha decidido esperar a que el Juzgado de lo Social número 8 de Málaga se pronuncie sobre la sentencia que dictó el pasado mes de diciembre en relación a que el convenio en vigor hasta la aprobación de uno nuevo será el de 2010-2012 y que ha generado distintas interpretaciones que mantienen bloqueado el avance de las conversaciones con el comité de empresa.

Tras la última reunión de la mesa negociadora celebrada ayer, y en la que por primera vez participaron representantes de los grupos de la oposición (PSOE y Málaga Ahora), la situación con respecto a las posturas de unos y otros sigue siendo la misma y todo queda supeditado entonces a lo que digan los tribunales. En ese sentido, el Juzgado de lo Social número 8 deberá pronunciarse sobre el recurso de suplicación presentado por la empresa, en la que el Ayuntamiento de Málaga tiene el 49% del accionariado, contra la sentencia al entender que el convenio de 2010-2012 debe aplicarse pero con las modificaciones realizadas después en las distintas negociaciones llevadas a cabo con respecto a algunos artículos.

Pero además, se está a la espera de lo que dicte el juez respecto a la petición de la ejecución de la sentencia que presentó el comité de Limasa para forzar a la empresa a que comience a aplicar de inmediato el convenio de 2010-2012 íntegramente. El problema es que eso supondría tener que incrementar el presupuesto de la sociedad en unos ocho millones de euros, lo que el Ayuntamiento de Málaga ya ha descartado rotundamente.

En el caso de que el juez estime la solicitud de los representante sindicales, la empresa hará un descuelgue del convenio ante la imposibilidad de disponer de más dinero para cumplir con todo lo que estipula el convenio. El concejal de Sostenibilidad Medioambiental en el Consistorio malagueño, Raúl Jiménez, aseguró que es una de las posibilidades, ya que insistió en que como máximo el presupuesto para este año es el mismo que en años anteriores -unos 85,9 millones de euros- más 2,2 millones de euros para la contratación de eventuales. "Es que no hay más y habrá que ajustarse a lo que hay", dijo el edil, que consideró que "ya se paga suficiente dinero para que la ciudad esté limpia y lo que hay que mejorar es la gestión y la eficacia".

El presidente del comité de empresa, Manuel Belmonte (UGT), por su parte, criticó "la prepotencia" de la empresa y el hecho de que "se cierre en banda a negociar", cuando aseguró que "hemos demostrado flexibilidad a la hora de negociar algunos artículos como el tema de las vacaciones". Eso sí, dijo que en cuanto a los descansos y al concepto de la paga productividad mantienen su postura.

Sin novedades sobre las sanciones

La dirección de Limasa y el comité de empresa siguen teniendo pendiente la revisión de todas y cada una de las sanciones firmes puestas a conductores y operarios del servicio de recogida de basura por supuesto bajo rendimiento. Aún no hay fecha para convocar la comisión que deberá analizarlas tras el paro por sopresa de unos 200 trabajadores en señal de protesta. La decisión fue paralizar, que no eliminar, la ejecución de las sanciones firmes. En total, 164 sanciones graves cursadas ya contra empleados y que suponen una suspensión de empleo y sueldo de 374 días. Además, la empresa ha tramitado otras 99 sanciones leves, que suponen un día de suspensión por cada una de ellas, y ocho con dos días de suspensión. A ellas se suman también las 506 amonestaciones verbales que ha cursado Limasa por el mismo motivo.